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Protección solar bio.
Como llega el buen tiempo toca hacer una repaso acerca de la protección solar. Algunos datos ya los apuntamos en la primera parte de este artículo elegir filtro solar 1, ¿químico o físico?; os lo enlazo por si alguien no lo ha leído.
Pero como el tema da para mucho y se quedaron muchas cosas en el tintero vamos a explicar algunas cosillas que todos deberíamos tener en cuenta en nuestra relación con el Astro Rey.
La radiación solar.
Por establecer claramente de qué nos tenemos que proteger, vamos a distinguir los dos tipos de rayos ultravioletas que nos afectan.
–Radiación UVA, es responsable del bronceado rápido pero también del fotoenvejecimiento. Tiene relación con algunos tipos de cáncer de piel y los dermatólogos advierten del aumento de esta patología debido al uso de las cabinas de rayos UVA.
-Radiación UVB, es menos penetrante pero es la responsable de las quemaduras solares y de la mayor parte de los cánceres de piel. El factor de protección solar (SPF) que figura en las cremas se establece en relación al efecto barrera sobre estos rayos, aunque en general la protección frente a los UVA está en consonancia con el número SPF que marca la etiqueta. En una crema de factor 15, la protección UVA estaría en 5 como mínimo; en una crema de factor 50 estaría en 15. La protección UVA resulta ser un tercio, como mínimo, del número que aparece como SPF y debe venir indicada en la etiqueta con un círculo donde aparezca la palabra UVA.
Para que quede claro: no existe ninguna crema que ofrezca una protección total frente a los rayos solares, ni aquellas que tienen un factor 50+. En realidad la protección de un FPS 30 a un 50 apenas mejora en un 1% y añade una mayor cantidad de filtros, que cuando hablamos de filtros químicos no son nada recomendables.
El FPS 15 bloquea el 93% de la rayos UVB.
El FPS 20 bloquea el 95% de los rayos UVB.
El FPS 30 bloquea el 97% de los rayos UVB.
El FPS 60 bloquea el 98% de los rayos UVB.
Por último, el número FPS se establece en pruebas de laboratorio que nada tienen que ver con el uso real, no tienen en cuenta la arena de la playa , el roce de la toalla o los abrazos del niño. Tendríamos que ir a la playa literalmente bañados en crema para conseguir la protección que aseguran tener, por eso es muy importante que repitamos las aplicaciones cada poco tiempo y sobre todo después de los baños.
Más cosas importantes.
La mejor protección solar es la barrera física, una camiseta tupida y un buen gorro ofrecen muy buena protección. Así también, arrimarse a una buena sombra es un modo tradicional de resguardarse muy recomendable; por dar un ejemplo, debajo de una sombrilla ya estamos evitando un 60% de los rayos solares, hay que tener en cuenta que los rayos no solo vienen de arriba, también nos llegan los que rebotan en las superficies de alrededor.
Es importante evitar las panzadas de sol, mejor ir acostumbrando a la piel poco a poco. Aquí tiene su importancia la hora del día; conviene evitar el sol de 11 a 4 (por lo menos los primeros días), como la hora solar no corresponde con la del reloj una forma sencilla de saberlo es mirando nuestra sombra, si es tan larga como nosotros o más: vía libre, si no es así mejor esperamos.
Niños y sol
La sombra y ropa apropiada es la única protección recomendable para niños menores de 6 meses. No deben tomar el sol NUNCA y no deben utilizar cremas protectoras; ninguna está pensada para ser utilizadas en niños tan pequeños y si hablamos de las cremas convencionales menos, están llenas de productos tóxicos incluso sin tener en cuenta los filtros químicos.
Hasta los 6 meses nada de sol y hasta los 3 años con mucha moderación. Y esto es impepinable.
Mira nuestro solares
Composición de las cremas.
Eligiendo filtro solar.
Como ya vimos a la hora de elegir filtros existen de dos tipos, los químicos y los físicos. Los físicos son básicamente dos: el óxido de zinc y el dióxido de titanio. En los químicos existe más variedad, algunos se deberían evitar, otros se considera que son seguros. Como dijimos pasaros por el post ¿Físico o Químico? para ampliar un poco este punto.
En este cuadro, traducido de EWG. org aparecen todos y los más aconsejados.
Producto EWG puntuación de riesgo
Uso (en USA) Penetración en la piel Disruptor hormonal Alergia en la piel.
Filtro UV con alta toxicidad
Oxybenzone 8 Amplio Detectado en casi todos los norteamericanos.
Encontrado en la leche materna Actua como un estrógeno, altera la producción de esperma en animales; asociado con endometriosis en mujeres. Alta incidencia de alergia cutánea.
Octinoxate (Octylmethoxycinnamate) 6 Amplio Encontrado en la leche materna. Menos de de un 1% penetra en la piel en estudios de laboratorio Actividad hormonal; Afecta a la tiroides, al sistema reproductivo y al comportamiento en estudios animales. Moderada incidencia de alergia cutánea
Filtros UV con moderada toxicidad
Homosalate 4 Amplio Encontrado en leche materna. Menos de un 1% de penetración en la piel en estudios de laboratorio. Disruptor hormonal N/A
Octisalate 3 Amplio Penetración en la piel en estudios de laboratorio. N/A Raramente se presenta.
Octocrylene 3 Amplio Encontrado en leche materna. Penetración en la piel en estudios de laboratorio. N/A Alta incidencia de alergia cutanea.
Filtros UV con baja toxicidad
Titanium Dioxide 2 /uso tópico 6/ polvo o spray
Amplio No hay penetración cutánea No hay evidencia de que produzca alteración hormonal Ninguna
Zinc Oxide 2/uso tópico 4/ polvo o spray Amplio; excelente protección UVA Menos del 0.01 de penetración cutánea No hay evidencia de que produzca alteración hormonal. Ninguna
Avobenzone 2 Amplio; el mejor filtro químico para UVA Penetración muy limitada No hay evidencia de que produzca alteración hormonal. La degradación del producto da lugar a alta incidencia de alergia
Mexoryl SX 2 No autorizado en USA. Menos de un 0.16% de penetración cutánea. No hay evidencia de que produzca alteración hormonal. Casos muy raros de alergia.
Pues este es el cuadro que aparece en el informe anual sobre protectores solares de la EWG (Environmental Working Groups) de Estados Unidos, parece todo bastante sencillo. Pero, ¡ay! amigo, otra cosa es enfrentarse a una etiqueta donde los nombres nunca aparecen como aquí se reflejan. Por ejemplo el octinoxate es fácil que aparezca como Octyl methoxycinnamate o ethylhexyl methoxycinnamate, estos son los nombres con los que tienen que indicarse en el INCI de cualquier producto. Pues así con casi todos. La oxybenzona se presentará como Benzophenone-3 o 2-Hydroxy-4-methoxybenzophenone. El homosalate será 3,3,5-trimethyl- salicylate cyclohexanol; 3,3,5-trimethylcyclohexyl 2-hydroxybenzoate; 3,3,5-trimethylcyclohexyl salicylate; ¡es de locos!, ojo, por tanto, a la nomenclatura de los distintos compuestos químicos.
Por tanto a la hora de elegir sería bueno que te decantaras por los que presentan menor puntuación de riesgo, los 4 últimos filtros serían los elegidos. En la etiqueta la avobenzone puede aparecer como butyl methoxydibenzoylmethane, 1,3-propanedione, 2-butyl-2-methoxy-1,3-diphenyl-; 2-butyl-2-methoxy-1,3-diphenyl- 1,3-propanedione; 4-tert-butyl-4′-methoxydibenzoylmethane. Como excepción los filtros físicos aparecen tan cual: titanium dioxide y zinc oxide. El Mexoryl sx suele aparecer también con ese nombre.
Como habréis visto existe una puntuación de riesgo mayor cuando los filtros físicos se usan en spray. Se debe a que la inhalación de estas partículas no están exentas de peligro; únicamente tenemos que tener la precaución de no pulverizar directamente sobre la cara o alrededor de ella.
De todas formas como recordamos más abajo, la crema no solo es el filtro.
La crema no es solo filtro.
Es muy fácil en una crema convencional que un mal filtro solar se rodee de otros malos compañeros que hacen de la crema una mezcla nefasta. Atento por tanto a los conservantes (parabenos o phenoxyethanol) y otros aditivos. Uno es especialmente peligroso aunque parece inofensivo, existen estudios en animales que corroboran un aumento de tumores y lesiones de piel cuando se une a la exposición solar. Su nombre es vitamina A. Más concretamente la forma de la vitamina llamada retinyl palmitate, intentad evitarlo en vuestras cremas.
En las cremas ecológicas es de apreciar que a los filtros mencionados se unan aceites vegetales o derivados vegetales que actúan potenciando el efecto de la protección solar. No es raro que aparezcan la manteca de karité, el aceite de sésamo, la jojoba o el extracto de zanahoria. Cuando compramos una crema bio también nos aseguramos que no hay derivados petroquímicos a la vista y que su repercusión medioambiental es menor.
Creo que te he contado lo más importante para que puedas elegir tu protector solar ideal, como siempre te sugiero algunos de los productos que puedes encontrar en nuestra tienda y que son perfectos para el sol y para tu piel.
Este post se ha publicado primero en El blog de Árnica digital..
Fuente: este post proviene de Arnica Digital, donde puedes consultar el contenido original.
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