La razón es la siguiente, todo tiene relación con la gravedad y la fuerza del corazón, ya que al estar ayudado por la gravedad la sangre puede circular con mayor facilidad en la parte superior de nuestro cuerpo ayudan a oxigenar más rápido nuestro cerebro.
Por su parte, esta terapia tiene una función similar obteniendo beneficios, principalmente, a nivel circulatorio y es muy sencilla de practicar ya simplemente te tomará unos 20 minutos de tu día como máximo, lo único que necesitas hacer es ubicar una pequeña almohadilla y un muro para comenzar. A continuación te mostraremos como ponerla en marcha:
Antes de comenzar puedes hidratarte e ir al baño para evitar interrupciones inesperadas una vez puesta en marcha, por otra parte, puedes colocar una música relajante de fondo para que te ayude a crear un ambiente de tranquilidad.
Coloca la almohadilla en tu zona lumbar para alivianar el impacto del peso de tus piernas.
Una vez frente al muro y con la almohadilla en su respectivo lugar, deberás elevar tus piernas y recostarlas al muro manteniéndolas derechas.
Mantén esta posición por 20 minutos aproximadamente y mantente relajado.
Algunos de estos beneficios que la terapia ofrece son:
Relajación: Esta terapia es normalmente practicada en el yoga y es conocida por lograr llevar a una especie de conexión entre el cuerpo y la mente. Al ponerla en práctica podrás percibir una relajación muscular casi inmediata y una paz mental.
Al mismo tiempo, esta terapia nos ayuda a oxigenar nuestro cerebro, lo cual nos ayuda a meditar y a entrar en un estado de paz y tranquilidad sin darnos cuenta.
Mejora el proceso digestivo: El adoptar esta posición puede ayudar a la movilidad intestinal haciendo que tengamos una mejor absorción de los nutrientes en los alimentos.
Reduce la acumulación de líquido en las piernas: Se pueden observar excelentes beneficios practicando esta terapia, ya que puede hacer que los líquidos atrapados en las piernas bien sea por problemas de sobre peso, fallos renales o cualquier otra causa fluyan con mayor facilidad y nos obstaculicen la circulación de la sangre.
Relajar el sistema nervioso: Cuando te encuentras en esta posición puedes entrar en un estado de relajación en el cual podrás poner en práctica las respiraciones lentas mientras cierras los ojos por unos segundos, lo cual tiene un efecto en nuestro sistema nervioso además de aliviar la tensión muscular acumulada.
Alivia los dolores en las piernas: Si bien es cierto, duros días de trabajo pueden hacer que nuestras piernas queden adoloridas y agotadas, por esta razón el poner en práctica esta terapia al final del día puede otorgarte magníficos beneficios aliviando el dolor de forma rápida y sencilla.
.