Al igual que hice con el dolor lumbar hace unos meses, hoy te voy a hablar de cuándo deberías preocuparte cuando tienes un dolor cervical. La tendencia es a que todos nos preocupemos mucho y muy pronto y la realidad es que son pocos los casos en los que dicha preocupación está justificada. Sí, el dolor cervical puede ser bastante molesto y limitante, ya que te va a influir en tu vida diaria… dificultad para conducir, para estar sentado durante largos periodos de tiempo, para hacer las tareas del hogar, etc. Pero esto no significa que sea un problema por el que debas alarmarte, de hecho, si esto ocurriera, influiría negativamente en tu dolor cervical.
Las situaciones en las que el dolor cervical podría ser algo de lo que preocuparse van a estar marcadas por la presencia de “red flags” (banderas rojas). Las red flags, como ya te dije en otra entrada, son signos y/o síntomas que nos indican que nuestro dolor (en este caso cervical) puede deberse a un problema de salud que requiere atención médica, ya que podría ser debido a una afección algo más preocupante.
Antes de comenzar con las banderas rojas, te voy a dar unos datos a tener en consideración. Los casos en los que el dolor cervical podría ser un problema se da más comúnmente en personas que presentan:
Nuevos síntomas aparecen antes de los 20 años de edad o después de los 55 años.
Debilidad en más de un miotoma (grupo muscular inervado por un nervio raquídeo) o pérdida de sensibilidad en más de un dermatoma (área de la piel inervada por un nervio raquídeo).
Dolor intratable y que aumenta con el paso del tiempo.
Los peores casos que nos podemos encontrar son mielopatías (afectación de la médula espinal), cáncer, infección, inflamación y fracturas de gran consideración
Banderas rojas del dolor cervical
Las banderas rojas que podrían sugerir el padecimiento de mielopatías son…
Progresión insidiosa (paulatina con efectos dañinos).
Síntomas neurológicos del tipo marcha alterada, torpeza y/o debilidad de las manos, pérdida de función sexual, intestinal y/o urinaria.
Signos neurológicos:
- Signo de Lhermitte: La flexión de cuello (movimiento de la cabeza hacia abajo) causará sensación de descarga eléctrica que irradia a la columna y las extremidades.
- Signos de motoneurona superior en miembros inferiores: signo de Babinsky / reflejo plantar (extensión dorsal del dedo gordo del pie, generalmente acompañado de la apertura de los demás dedos en respuesta a estimular la planta del pie con un objeto romo), hiper-reflexia (respuesta refleja excesiva), clonus (contracciones involuntatias y repetidas al estirar ciertos musculos), espasticidad (musculatora en contracción mantenida).
- Signos de motoneurona inferior en miembros superiores: atrofia (disminución del tamaño muscular), hiporeflexia (respuesta refleja disminuida).
- Pérdida de palestesia (sensibilidad a la vibración) y percepción de la posición de las articulaciones que es más evidente en las manos que en los pies.
Banderas rojas que sugieren cáncer, infección o inflamación:
Malestar, fiebre, pérdida de peso sin explicación.
Dolor que va en aumento, no remite y dificulta el dormir.
Historia clínica en la que se aprecia: haber padecido cáncer, enfermedad inflamatoria, tuberculosis, inmunosupresión, abuso de drogas VIH u otras infecciones.
Linfoadenopatía (transtorno de los ganglios linfáticos).
Sensibilidad vertebral importante (vértebra extremadamente sensible a la palapación).
Banderas rojas que sugieren trauma severo o lesión ósea:
Caída de gran altura o accidente, como puede ser un accidente de tráfico.
En personas con osteoporosis, se pueden dar fracturas con un trauma leve.
Historia de cirugía cervical.
La información contenida en esta entrada es sacada del National Institute for Health and Care Excellence.
La foto es de dominio público en Pixabay.
La entrada Cuándo preocuparte por un dolor cervical aparece primero en La Fisioterapia.net, tu blog de fisioterapia y salud.