Los objetivos propios del año nuevo son un síntoma de la evolución personal que persigue cualquier deportista profesional o aficionado. El verdadero reto del Año Nuevo es definir metas profesionales, pero también cumplirlas. Ahí está el desarrollo y el aprendizaje. Y para cumplirlas. debes comenzar por hacer una buena definición de tus propósitos, de lo contrario, si no concretas el punto de llegada adecuado, corres el riesgo de llegar al lugar más inesperado. ¿Cómo lograrlo?
Elige tres metas deportivas
Deben ser metas que te entusiasmen, que te aporten una ganancia personal con su cumplimiento, que aporten una ventaja que ahora no tienes. Visualiza esas metas en tu mente, reflexiona sobre cómo te sientes y medita sobre si te compensa ese esfuerzo.
Une el objetivo general con objetivos específicos
Es decir, esa meta general, tiene que estar enlazada con otros objetivos a corto plazo que conectan con ese propósito universal. Imagina que quieres perder peso y que el deporte es un aliado de ese proceso de adelgazamiento combinado con una dieta sana, entonces, uno de los pasos que necesitas concretar es cuántos días irás al gimnasio y en qué horario. Los objetivos específicos son aquellas acciones concretas que te acercan a tu meta final.
Haz anotaciones
Cuanta más información pongas por escrito sobre estos propósitos de Año Nuevo y este desarrollo posterior, más sencillo te va a resultar poder hacer un seguimiento de tus avances, retrocesos y posibles puntos de mejora. Además, puede ocurrir que, por ejemplo, durante el mes de febrero decidas hacer un replanteamiento de alguno de estos propósitos.
Escribir un diario deportivo puede ser una experiencia agradable puesto que no solo el yoga, el mindfulness o la meditación te permiten poner en armonía cuerpo y mente. Por medio de la escritura de un diario deportivo también realizas un entrenamiento mental que es terapúetico para mejorar tu concentración física.
Comparte tus propósitos deportivos
Además de anotar tus propósitos deportivos en un diario también puedes compartir esas metas que te ilusionan con personas importantes para ti. De este modo, tu nivel de compromiso aumenta cuando haces partícipes a otros seres queridos de que ese objetivo es significativo para ti.
Igualmente, de este modo, te abres a la posibilidad de recibir otras sugerencias, opiniones o críticas constructivas. Tú eres el dueño de tus decisiones, sin embargo, a veces, tu mirada llega hasta un punto determinado y, la mirada de otra persona puede complementar tu propio punto de vista.
A su vez, si en algún momento te sientes desmotivado con uno de estos propósitos, algo muy realista por otra parte, hablar con alguien de confianza te ayudará a no tirar la toalla ante el menor obstáculo.
Premio
Es cierto que el premio principal es aquel que surge del cumplimiento de un propósito, sin embargo, también puedes concretar qué homenaje te vas a dar a ti mismo tras el esfuerzo de cumplir el plan de acción.