Antecedentes de la vaginosis bacteriana
En la vagina habitan tanto bacterias buenas como bacterias dañinas, pero siempre debe existir un equilibrio entre ambos grupos para la preservación de un entorno saludable. Si el equilibrio de la flora bacteriana se pierde, entonces es muy probable que ocurra la vaginosis bacteriana. Contrariamente a la creencia popular, rara veces es causada por relaciones sexuales. Es diferente de la tricomoniasis y la candidiasis, ya que estas dos condiciones no son infecciones bacterianas.
Vaginosis bacteriana: posibles curas
Los antibióticos son los medicamentos más comúnmente recetados para tratar la vaginosis bacteriana. Estos antibióticos incluyen a la clindamicina y el metronidazol. Lamentablemente, una gran parte de la población femenina que sigue este tipo de tratamiento no queda satisfecha. Algunas mujeres incluso afirman que el tratamiento no es efectivo y que continúan experimentan los síntomas después de un tiempo. Esa es la desventaja de los antibióticos, que aunque son necesarios para la cura de la vaginosis, crean un efecto recurrente de la enfermedad. Esta es la razón por la que se ha estado recurriendo a los remedios naturales para curarla.
Síntomas de la vaginosis bacteriana
El síntoma más común experimentado por casi todas las mujeres que sufren de vaginosis bacteriana es el flujo vaginal anormal. Esta descarga aparece con frecuencia después del contacto sexual, y presenta un olor desagradable como a pescado que puede ser muy molesto. La descarga en sí es de color grisáceo y tiene una textura gruesa. Es posible que la mujer también experimente irritación con comezón, y es por eso que algunas mujeres asumen se trata de una infección por levaduras y no vaginosis bacteriana.
Pruebas para la vaginosis bacteriana
Comúnmente en algunas clínicas se lleva a cabo la prueba de olor para determinar si una mujer padece vaginosis. Para su funcionamiento se recoge una muestra de la secreción y se le aplica hidróxido de potasio. Si esto desprende ese olor desagradable como a pescado, entonces hay una gran posibilidad de que la mujer tenga VB. También pueden llevarse a cabo pruebas de la acidez. Si el valor de pH resultante es mayor de 4,5, la vaginosis bacteriana puede estar presente. El método más seguro para diagnosticar esta condición es realizar una prueba de laboratorio donde se analice bajo microscopio una muestra del flujo vaginal previamente recolectado.
Si notas cualquiera de los síntomas que hemos mencionado, lo más inteligente y responsable es consultar a tu médico. De esta manera, puedes obtener el diagnóstico correcto y el método de tratamiento más adecuado.