De cualquier forma los síntomas que provoca suelen ser tan molestos (flujo vaginal anormal, de color turbio o grisáceo, mal olor vaginal como a pescado, posible irritación o picazón), que más de una se ha visto dedicada a encontrar una cura natural para su padecimiento. De eso trata este artículo, de conocer un poco más sobre las opciones de tratamiento para la vaginosis, tanto convencionales como naturales.
Curas convencionales para la VB
El camino convencional definitivo para la cura de la vaginosis bacteriana es, sin duda, el curso completo de antibióticos, generalmente con Metronidazol. A pesar de que los antibióticos son una buena opción como tratamiento, hay un inconveniente significativo. Se plantea que no son capaces de eliminar de forma permanente la causa de la infección, sólo son eficaces en el alivio de los síntomas. De hecho, muchos informes han demostrado que los antibióticos perjudican aún más la flora vaginal y por tanto, provocan la vaginosis bacteriana recurrente.
Curas naturales para VB
Dados los efectos secundarios que se asocian al uso de antibióticos para la cura de la vaginosis, cada vez son más las personas que recurren a opciones naturales para resolver esta situación. Estas variantes no solo resultan más económicas, sino que actúan sin afectar la flora vaginal normal y sin crear condiciones favorables para una recurrencia.
Veamos algunos ejemplos de curas naturales que pueden hacerse fácilmente en el hogar. El vinagre de sidra de manzana diluido en agua se puede utilizar como parte del baño, en particular en el área vaginal. A esto se le puede añadir el uso del ajo, que como ya sabemos, es un potente antibacteriano natural. También se puede probar el aceite de orégano, reconocido en gran medida por su propiedades antifúngicas y antiinflamatorias.