Por norma general, las pruebas cutáneas de alergia te indicarán a qué alérgenos eres más sensible. Sin embargo, los resultados de este procedimiento no siempre son precisos. Ante esta eventualidad, puede que necesites un análisis de sangre más exhaustivo, una prueba cutánea con inyección o los test de alergia con parches.
Test de alergia con punción o raspado
Este estudio permite identificar al especialista lo distintos tipos de alergias: a ciertos alimentos, a ácaros, al polen, a la caspa y pelo de mascotas y al moho. Se realiza en el antebrazo o en la parte superior de la espalda si se trata de un niño.
El ensayo tiene lugar en un centro médico y siempre bajo supervisión. Aunque es bastante improbable que se desencadene una reacción alérgica peligrosa, es imprescindible que el centro cuente con la equipación necesaria para hacerle frente. El test de alergia finaliza en poco más de media hora.
Desinfectada la zona a exponer a los distintos alérgenos, el auxiliar marca con rotulador una serie de cuadraditos en los que, a continuación, dejará caer una gota de extracto de alérgeno. A continuación, y con ayuda de lancetas, pinchará la zona de piel en contacto con cada gota para que el líquido la penetre. Por supuesto, se emplearan tantas lancetas como extractos de alérgenos se usen. El pinchazo es superficial, con lo que solo provoca una leve molestia. Nada de dolor.
A modo de puntos de control, se reservan un par de cuadraditos en los que se deja caer una gota de histamina y otra de glicerina o solución salina. Se espera que la hormona de histamina haga reacción con la piel. En caso contrario el test de alergia no servirá para mostrar tus alergias. Por su parte, la sección con glicerina o solución salina deberá permanecer inalterable. De no ser así, significará que tienes la piel sensible y puede llevar a falsos positivos en el ensayo.
El siguiente paso es esperar. En apenas 20 minutos tu piel habrá reaccionado a aquellos extractos a los que presente alergia. En caso de ser así, en tu piel aparecerá una roncha abultada, roja y te picará. El auxiliar medirá el tamaño de la marca, volverá a desinfectar el área tratado con alcohol e informará al especialista de los resultados.
Si los resultados del test de alergia con punción no resultaran concluyentes y el médico lo considera oportuno, puede recomendar que te realicen la prueba intradérmica o la prueba con parches. En el primer caso se introduce el alérgeno en la piel con una inyección y, en el caso de los parches, se deja en contacto con la piel el alérgeno durante un periodo de entre 24 y 72 horas.
Por último, los análisis de sangre se emplean para la detección de anticuerpos. Aunque no son tan efectivos como los ensayos cutáneos, ayudan a determinar la cantidad de anticuerpos que intervienen ante la presencia en sangre de un alérgeno determinado.