Lo único real que tenemos es el momento presente. ¿Cómo alguien puede ser feliz viviendo algo que aún no ha llegado? La vida se desarrolla única y exclusivamente en este momento. Todo lo demás son fantasías mentales.
Estamos acostumbrados a que en nuestra sociedad se nos inculque la adicción a la droga del futuro. Desde muy niños vemos como algo normal el disfrutar solo en determinados momentos. Cuando acabe el cole, cuando nos vayamos de vacaciones, cuando los niños crezcan, cuando pague la hipoteca, cuando me jubile…
Vamos convirtiendo nuestra vida en un montón de momentos imaginarios a los que nos afanamos en llegar. De esta forma obviamos por completo el camino que recorremos hasta llegar a ellos. Y cuando llegamos a ellos, de nuevo, ponemos nuestra atención en la próxima meta, volviéndonos a perder lo que en ese momento suceda.
Fuente: Pixabay/yeu_rodvall
Sin embargo, otra forma de vivir es posible. Más que posible, yo diría que es imprescindible. El hecho de vivir de verdad, pasa por ser conscientes de cada momento vivido. Es necesario, vivir el momento presente disfrutando y aceptando aquello que traiga ese momento, procurando no escapar de lo que ese momento nos traiga. Si algo ya ha llegado es absurdo ignorarlo o rechazarlo.
Aprendamos a vivir en el presente
No obstante, esta forma de vida requiere de un aprendizaje, o quizá podríamos decir un reaprendizaje. Cuando llegamos a este mundo, mucho antes de que la sociedad nos otorgara sus normas, su lenguaje y sus creencias, sí que sabíamos vivir de esa manera. Cuando eramos muy niños, cada momento brillaba por si mismo y el futuro solo nos importaba cuando se convertía en presente. Pero, poco a poco, al ir entrando en la sociedad, fuimos perdiendo esa frescura y alegría de vivir.
No deberíamos olvidar que nunca sabemos cuando será el último día de nuestra vida. Hoy no es solo un día más, hoy es un único día que, en este momento, tienes para vivir intensamente. El mañana hoy no sabemos si existe.
El presente es un regalo
La palabra presente tiene varios significados: ” Se aplica al tiempo o al suceso que transcurre en el momento en que se habla” o “Cosa que se regala a una persona”, ¿Te das cuenta entonces de que el presente es un regalo para ti? ¿Por qué no aprovecharlo?
Fuente: Pixabay/ Pexels
No pongas condiciones al momento presente. Deja de pensar que tu felicidad llegará cuando suceda tal o cual cosa. La felicidad no es una meta, la felicidad está a lo largo de todo el recorrido. Si estuviera solo en la meta sería de muy corta duración, sin embargo experimentarla durante todo el trayecto durará toda tu vida.
Abre tus ojos a aquello que suceda en el ahora y sé consciente de que eso no se volverá a repetir de la misma manera. Lo que es, es lo que es, si ha llegado a tu vida es porque toca vivirlo y es de locos intentar luchar contra ello.
No interpretes, solo vive
Deshazte de ideas preconcebidas, cualquier cosa que esté sucediendo no ha llegado a nosotros para ser juzgada o interpretada. Esa actitud solo conseguirá teñir de un color u otro cada suceso, dándole un significado que siempre estará basado en nuestras creencias y no en la realidad.
Procura vivir lo que ocurra y no lo juzgues. Si llueve no es mejor ni peor que si no llueve. La realidad es que llueve y lo mejor que podemos hacer es hacernos uno con ese suceso y disfrutarlo.
Cuando algo aún no está en nuestra realidad no deberíamos darle la importancia que le damos a algo que ya ha llegado. Si tu mente intenta hacer que sientas preocupación por el futuro, hazla callar y concéntrate en aquello que estés haciendo en ese momento. Ya verás como si lo haces de forma inmediata, el resultado será estupendo. No te identifiques con ningún pensamiento que te hable de futuro intentando preocuparte.
Deja de controlar
Muchas personas tienen la tendencia a controlar cualquier cosa que suceda en su vida y este control es un gran motivo de estrés. El hecho de controlar todo es una ilusión y todos lo sabemos. Es imposible tener un control continuo sobre la realidad, porque la vida no se deja controlar. Todos sabemos que, en muchas ocasiones, el hecho de que las cosas sucedieran de otra manera, fue lo mejor que pudo pasar, por mucho que no lo viéramos de antemano. Confía en la vida, se lo merece.
Fuente: Pixabay/Pexels
Intenta, también, dejar de comparar lo que está sucediendo con lo que pasó en otro momento o con la idea que tú tienes de como debería de ser. La comparación hace que el regalo que encierra este momento se nos escape de las manos.
Esfuérzate por acercarte a cada momento como si fueras un niño que lo vive por primera vez. No dejes que tu mente lo contamine. Y sobre todo, procura no hacer varias cosas a la vez. Haz una cosa en cada ocasión, procurando poner toda tu atención en ella; cuando llegue lo siguiente haz lo mismo.
Incluye la meditación en tu vida
Intenta incluir la meditación entre tus rutinas diarias. El hecho de meditar, aunque solo sean 20 minutos, consigue que nuestra mente se calme y encuentre un remanso de paz.
Cuando meditamos logramos entrar de lleno en el momento presente sin ninguna dificultad. Además, los efectos benéficos de la meditación nos acompañan durante el resto de la jornada.
Existe mucha confusión acerca de la meditación. Sin embargo, la práctica contemplativa no requiere de técnicas ni teorías difíciles. Se trata simplemente de estar conscientes del momento presente y de propiciar el encuentro con uno mismo.
La vida es un regalo maravilloso que solo es posible saborear viviendo el momento presente. la meditación podrá permitirte parar, y experimentar de primera mano los beneficios de llevar una vida consciente y saludable. De esto mismo trata el método Crear Salud, que te ayudará a establecer nuevos hábitos en tu día a día, no solo para que empieces a meditar, sino para aprender a nutrirte adecuadamente y llevar una vida activa.
Anímate y prueba la app Siente que puedes descargar aquí y se convertirá en tu mejor compañera para guiarte en el camino de la meditación. Se trata de una metodología muy sencilla, que te abrirá las puertas del mindfulness y la psicología positiva, para mejorar tu bienestar y en definitiva, ser más feliz.