Los pétalos vibrantes, las raíces fuertes y las partes verdes y frondosas de la planta son todos remedios herbales y deliciosos brebajes para el té.
Aprenda más sobre la Equinácea, sus beneficios para la salud y cómo puede preparar una deliciosa taza usando partes de plantas frescas o secas de plantas de equinácea cultivadas en casa.
Fundamentos del té de Equinácea
El té de Equinácea, también conocido como el té púrpura, es un delicioso té de hierbas hecho de la planta de Equinácea. Hay una variedad de plantas de Equinácea que pueden utilizarse para preparar el té, entre ellas la Equinácea purpúrea, la Equinácea angustifolia y la Equinácea pálida.La flor perenne es nativa del este y centro de América del Norte, pero puede crecer en climas templados donde las plantas reciben al menos parte del sol. Hoy en día, las plantas se cultivan comúnmente en jardines de Europa y Asia también.
El té de Equinácea se puede hacer usando una variedad de partes de la planta de Equinácea, incluyendo las raíces, hojas, flores y tallos. Las flores y raíces púrpuras se utilizan más comúnmente para preparar el té.
Perfil de sabor
La Equinácea tiene un sabor agudo similar al del pino con una poderosa nota floral. Tiene un cuerpo suave con un final refrescante y a menudo se describe como similar a la reina de los prados. Acompáñala con un toque de miel o añade hierba de limón o menta para realzar el perfil de sabor.Beneficios para la salud de la Equinácea
La Equinácea fue utilizada por primera vez por los nativos americanos como un remedio herbario para curar enfermedades y aliviar los trastornos de la piel. Fue utilizada por las tribus para tratar las mordeduras de serpiente y combatir las infecciones.Refuerzo inmunológico
Hoy en día, uno de los beneficios para la salud más reconocidos del té de Equinácea es su capacidad para ayudar a tratar los síntomas del resfriado común. La Equinácea tiene propiedades antiinflamatorias que ayudan a reducir la hinchazón e irritación, lo que puede ayudar a aliviar la sensación de dolor de garganta.Este té también ayuda a estimular el sistema inmunológico gracias a los antioxidantes que ayudan a eliminar los radicales libres y a evitar las bacterias infecciosas. El consumo de Equinácea puede ser bueno para la salud en general y mantenerte en forma todo el año.
Previene las infecciones
La Equinácea también puede combatir las infecciones, incluyendo las infecciones vaginales por levaduras, las infecciones del tracto urinario y las infecciones del oído. El té de Equinácea contiene ácido cafeico, que ha demostrado tener propiedades antimicrobianas.Los polisacáridos de la Equinácea también funcionan para evitar que las células dañinas se repliquen y propaguen la infección. Estos compuestos químicos también pueden aumentar la producción de glóbulos blancos, que son el mecanismo de defensa natural del cuerpo contra las infecciones.
Disminuye el dolor
Otra propiedad medicinal del té de Equinácea es su capacidad para aliviar el dolor.Un estudio publicado en Natural Product Research encontró que una combinación de Equinácea y jengibre ayudó a aliviar el dolor articular en las rodillas. El suplemento funcionó reduciendo la inflamación.
Aumenta el estado de ánimo
El aceite esencial y la fragancia del té de Equinácea elaborado pueden ayudar a mejorar el estado de ánimo. El aroma desencadena la producción de la hormona de la felicidad conocida como dopamina. También puede disminuir los niveles de cortisol, ayudando a reducir el estrés y fomentar un estado de ánimo más elevado.Cómo hacer té de Equinácea
El té de Equinácea puede ser hecho de la raíz de Equinácea o de las flores de su planta de jardín. Puede usar flores, hojas, tallos y raíces frescas, o secar un lote para tener siempre algo a mano. Aquí te damos una receta básica para preparar té de hierbas de Equinácea en casa.
Consejos para la cosecha
Las flores de la Equinácea deben ser cosechadas justo después de que la temporada de floración haya comenzado. Recortar las flores en la base del tallo justo por encima del primer conjunto de hojas.Esto fomentará un nuevo crecimiento, amplificando su cosecha cada año. No use las cabezas de semillas ya que no proporcionarán el sabor adecuado cuando se infundan en agua caliente.
Si quieres, puedes usar las flores recién cosechadas para hacer té. Si lo prefiere, también puede secar las flores de Equinácea. Simplemente colóquelas en una estera de bambú o cuélguelas de un tendedero.
Si elige colgar las flores, coloque una mesa o una manta debajo de los pétalos, ya que éstos se caen de los tallos. Lo mismo puede ser abajo usando las raíces y hojas de la planta de Equinácea.
Una vez que los pétalos de las flores, las raíces o las hojas se han secado, es hora de almacenarlas en un contenedor hermético.
Guárdelas en un frasco de vidrio u otro recipiente no reactivo y manténgalas en un lugar seco. Un lugar oscuro como un armario o un cajón es la mejor opción para evitar que el material vegetal pierda sabor.
Receta del té de Equinácea
Ingredientes:1 cucharada de Equinácea seca (o 2 cucharadas de Equinácea fresca)
10 onzas de agua
Edulcorante (OPCIONAL)
Instrucciones:
Poner a hervir el agua con una olla de cocina o una tetera.
Una vez que hierva, baje el fuego a medio y añada la Equinácea.
Ponga una tapa en la olla y cocine a fuego lento de 5 a 10 minutos. Si se usa una tetera, simplemente vierta el agua hirviendo en una taza de té y añada la Equinácea a una bola de té o a un infusor de té. Deje reposar durante 5 a 10 minutos.
Cuele las flores, raíces u hojas sueltas de la maceta y viértalo en una taza de té. Usando una bola de té, simplemente retire y deseche la Equinácea.
Añada saborizantes o edulcorantes como la miel y el limón si lo desea. ¡Disfrute!
Pruebe con la Equinácea
La Equinácea ofrece una variedad de beneficios medicinales junto con un sabor envolvente que seguro la convierte en uno de sus tés de hierbas favoritos.
Opte por el té de Equinácea casero de plantas frescas en el jardín de su casa o compre una variedad de hojas sueltas para una rápida y fácil elaboración. El té de Equinácea ofrece una variedad de opciones desde el té de raíz seca hasta la tintura de Equinácea fresca.