Es sustancial señalar que cuando el calor corporal oscila entre los 38 grados. Es vital tomar medidas drásticas o consultar con un especialista para controlar la situación. El hipotálamo es aquel que mantiene vigilada la temperatura corporal. Por lo tanto, cuando se siente demasiado frío o calor, éste actuará manifestando de cierta forma. Independientemente sea a través de la sudoración o con temblores.
Se debe acotar que, si la temperatura supera los 38 grados en los niños, estés alerta. Es sustancial actuar en consecuencia e intentar reducir la fiebre lo más posible; no obstante, en los adultos, dicha proporción no tiene a ser dañina a menos que se sufran de enfermedades tales como diabetes o hipertensión. Si con el pasar de las horas, la temperatura oscila entre los 40 grados, especialmente en los niños y ancianos; se debe atender a un especialista para poder controlar el trastorno.
¿Cómo bajar la fiebre?
Entre las principales prácticas que se pueden ejercen para disminuir la fiebre, se hallan las siguientes:Aplicar paños con agua: Es crucial que el empapado no esté demasiado frío; además, se deben acomodar tanto en la frente como en las axilas. En caso de que no surja efecto, se debe someter a un baño con agua tibia, con el fin de que se reduzca la fiebre hasta los 37-36 grados.
Hidratarse constantemente: Beber agua constantemente ayudará a que la fiebre baje, puesto que mediante la sudoración se pueden perder sales minerales y líquidos sustanciales para que el cuerpo recobre sus fuerzas. Los analistas especifican que es sustancial consumir menos de dos litros diarios, sin embargo, la dosis se debe aumentar de acuerdo a la magnitud de la fiebre.
No emplear abrigos: Aunque se sienta frío, se debe destacar que el cuerpo necesita refrigerarse, en otras palabras, cubrir es inútil para reducir la temperatura. Esto se traduce también a no emplear abrigos, puesto que, en los niños, en lugar de cubrirlo bajo decenas de mantas, hay que exponerlo al aire libre y dejar que libere el calor necesario.
Dieta adecuada: Cuando la temperatura supera los 38 grados el cuerpo necesita los nutrientes que le aportan los prebióticos, tales como el yogur, frutas, verduras y lácteos.