Las investigaciones indican que las células madre, cultivadas a partir de un embrión en fase inicial (blastocito), podrían reemplazar células dañadas por enfermedades del corazón, diabetes Parkinson u otras enfermedades.
¿Qué son?
Las células madre son células que se encuentran en todos los organismos multicelulares y que tienen la capacidad de dividirse (a través de la mitosis) y diferenciarse en diversos tipos de células especializadas y de autorenovarse para producir más células madre.
En las primeras semanas de la formación de un feto, el embrión contiene material genético versátil conocido como células madre. Estas células producen gradualmente células madre y el tejido que forma el resto del cuerpo a la vez.
Las células madre embrionarias y algunas células madre adultas pueden aislarse desde su localización original en embriones o tejidos y mantenerse en condiciones especiales de cultivo de manera más o menos indefinida mediante técnicas como la criopreservación (método que utiliza nitrógeno líquido a-196 °C para detener todas las funciones celulares y así poderlas conservar durante años); los blastómeros individuales; o la partenogénesis.
Recientes investigaciones han descrito que las [células madre musculares] sobreviven y mantienen sus propiedades tras un proceso de congelación post-morten.
Del cordón umbilical se puede aislar una población de células madre multipotentes que poseen características embrionarias y hematopoyéticas. Estas células madre adultas pueden diferenciarse en células de la sangre y del sistema inmunológico.
La ventaja de las células madre adultas sobre las embrionarias es que no hay problema en que sean rechazadas, porque normalmente las células madre son extraídas del paciente.
Las células madre del cordón umbilical son relativamente fáciles de obtener y presentan una baja inmunogenicidad, por lo que se han comenzado a utilizar en terapias para curar diversas enfermedades.
Gracias a los últimos avances científicos se demostró que el líquido amniótico contiene células de tejidos embrionarios y extraembrionarios. Las células madre de líquido amniótico no presentan controversia ética y pueden conservarse para uso propio.
Su uso en medicina
Las células madre podrían tener multitud de usos clínicos y podrían ser empleadas en medicina regenerativa, inmunoterapia y terapia génica. De hecho en animales se han obtenido grandes éxitos con el empleo de células madre para tratar enfermedades hematológicas, diabetes, párkinson, destrucción neuronal e infartos, cáncer, lesiones de la espina dorsal y daños en los músculos, entre otras enfermedades.
Aunque existen algunos tratamientos con células madre, la mayoría se encuentran en una etapa experimental. Aún en existen estudios concluyentes en humanos.
En los últimos años se está investigando en la proliferación in vitro de las células madre de cordón umbilical para aumentar el número de células madre y cubrir la necesidad para un trasplante.
Problemas éticos
El hecho de que estas células actualmente impliquen el uso de embriones humanos y de tejido cadavérico fetal conlleva un gran problema y un desafío tanto científico como ético y social sobre el uso de las células madre.
Muchos investigadores médicos opinan que es necesario avanzar con las investigaciones de las células madre embrionarias porque las tecnologías resultantes podrían tener un gran potencial médico, y que el exceso embrionario creado por la fertilización in vitro puede ser donado para las investigaciones.
Esto en cambio, produce conflictos con los movimientos pro-vida quienes adjudican la protección de embriones humanos. De acuerdo con muchas religiones y sistemas éticos, la vida humana comienza en la fecundación. Según sus argumentos, cualquier medida intencional para detener el desarrollo después de la concepción se considera como la destrucción de una vida humana.
Otros críticos no tienen un problema moral con la investigación con células madre humanas, pero tienen miedo de un precedente para la experimentación humana, como la clonación, y que garanticen que los embriones humanos sólo se obtengan a través de fuentes apropiadas.
Dentro de la comunidad médica, existen diferentes posturas, entre ellas que los blastocitos o embriones son organismos vivos que dentro de 9 meses serán seres humanos con derechos, por esto, no es ético el destruir el blastocito o embrión para obtener las células madre mientras que otros consideran que en la edad temprana de un embrión lo que se tiene es un brote de células con su masa interna.
En la mayoría de los países de la Unión Europea se permite la investigación con células embrionarias, pero no clonación terapéutica, al igual que en Australia. En Estados Unidos es legal la creación de líneas celulares pero sin fondos públicos. La legalidad de la clonación terapéutica depende del estado en que se encuentre.
Legislación
En el Reino Unido, Israel, China, y Suecia se ha dado el visto bueno tanto a las líneas celulares embrionarias como a la clonación terapéutica.
En otros países también se ha dado el visto bueno a las dos técnicas pero con cortapisas. En Brasil, por ejemplo, son legales las líneas celulares embrionarias en embriones creados por fertilización in-vitro con 3 años de edad, pero no la clonación terapéutica. Corea del Sur ha permitido las líneas celulares embrionarias, pero con autorización del Ministro de salud del país. Por su parte, Singapur admite la legalidad de las líneas celulares embrionarias si el blastocito es destruido 14 días después de la fecundación y, además, permite la clonación terapéutica.