La ansiedad es uno de los grandes enemigos psicológicos de nuestro tiempo. Al igual que el estrés, algunas personas han cometido el error de normalizar esta molestia, sencillamente, porque han hecho de la prisa una forma de ser en un mundo que va a mil por hora. Sin embargo, la ansiedad afecta a la salud física y emocional. Caminar es una excelente rutina para reforzar el bienestar. Cuando una persona sufre un ataque de ansiedad desea, por encima de todo, retomar la normalidad en su vida, es decir, volver a su zona de confort. ¿Cuáles son los beneficios que la rutina de caminar produce sobre el estado de ánimo?
Activar el cuerpo de forma positiva
La ansiedad activa el organismo pero de forma negativa. Por ejemplo, la persona tiene dificultades para respirar porque siente que le falta el aire. Sin embargo, los paseos activan el cuerpo y la mente a partir de estímulos positivos. Incrementan el nivel de resistencia, aumentan el tono muscular, producen alegría vital…
Contacto con la naturaleza
Si vives en la ciudad, es recomendable que elijas como zona de paseo lugares con amplias zonas verdes porque los espacios naturales aumentan la calidad de vida emocional. Es decir, tienes una mayor percepción de serenidad cuando respiras un aire no contaminado. En la era tecnológica, cuando la dependencia del móvil está tan presente, caminar te recuerda que tu propia naturaleza trasciende a la máquina.
Evitar el efecto de la rumiación
La rumiación hace referencia a esos pensamientos automáticos que surgen en tu mente cuando das vueltas y vueltas en torno a un mismo asunto que termina aplastándote. La ansiedad hace referencia a la preocupación por un asunto muy difuso. Durante el paseo, puedes concentrar tu atención en el ritmo de tu propio paso. Y esto te ayuda a reducir la ansiedad y el malestar psicológico por esta situación que te afecta. Durante el camino, puedes concentrarte en el ritmo de tus propios pasos, y esto te distrae de tu propia mente. Tal vez te cueste un poco al principio, pero luego, verás que todo fluye mejor.
Ejercicio recomendado para personas de todas las edades
La ansiedad es uno de los malestares psicológicos que afecta a personas de toda posición y edad. Pues bien, en positivo conviene recordar también que caminar es un ejercicio muy saludable para personas de todas las edades. Es un hábito que puede convertirse en la disciplina de dedicar todos los días un espacio para pasear, hacer un alto en el camino y tomarse la vida con otro ritmo. Tus paseos pueden ser igualmente terapéuticos tanto si los disfrutas en solitario como si los aprovechas en compañía. Lo más importante es que no pongas excusas y practiques deporte. Porque este ejercicio es un excelente bálsamo para canalizar las cicatrices del alma con nombre propio: ansiedad.
Caminar es un gran ejercicio para tratar la ansiedad y vivir el presente centrado en ti mismo.