Las alergias es toda reacción exagerada del sistema inmunitario ante un agente externo que para muchos otros resultaría totalmente inofensivo. Así, las alergias pueden dividirse en varios grupos según los agentes que las provoquen o de los síntomas con que se manifiesten.
Las alergias tienen distintas causas:
Alergia a alimentos: este tipo de alergia se produce con la ingestión, el contacto o la inhalación de algún alimento, un ingrediente e, incluso, la traza de uno. El causante de la reacción no es el alimento en sí, si no alguno de sus componentes, lo que se conoce como alérgeno. Los principales alimentos alergénicos son: la leche, el huevo, el pescado, el marisco, los frutos secos, los cereales y las frutas. Los síntomas suelen manifestarse a través de la piel, el aparato digestivo y el aparato respiratorio. En los casos más graves puede llegarse al shock anafiláctico.
Alergia al polen: esta alergia se presenta principalmente durante las estaciones de primavera y verano pero, en realidad, puede darse durante todo el año. El causante principal es el polen que generan las plantas y que entra en contacto a través del aire con la nariz, los ojos y la boca produciendo en muchos casos rinitis o asma.
Alergia a los ácaros del polvo: los ácaros son pequeños insectos arácnidos que se encuentran en el polvo doméstico. Debido a las condiciones que necesitan para sobrevivir, lo más habitual es encontrarlos en los colchones, los cojines y los sofás. Al igual que en el caso anterior, esta alergia puede producir rinitis y asma.
Alergia a los animales: el pelo y la piel de algunos animales, sobre todo perros y gatos, pueden provocar una reacción alérgica. Al igual que otros alérgenos ambientales provocan rinitis, conjuntivitis y asma e, incluso, en algunos casos erupciones cutáneas. En caso de mordeduras, esta alergia puede provocar un shock anafiláctico.
Alergia al moho: en condiciones de elevada humedad, así como en presencia de abundante materia orgánica, es fácil que crezca el moho. Este puede provocar reacciones alérgicas que se manifiestan a través de la rinoconjuntivis.
Alergia a medicamentos: aunque están creados para sanar, muchos fármacos pueden provocar reacciones alérgicas en determinadas personas. Generalmente esta alergia se manifiesta a través de síntomas cutáneos como la urticaria, pero no siempre es así. Los antibióticos, los antiinflamatorios, los antiepilépticos, y algunos anestésicos y medios de contraste iodados suelen ser los causantes.
Alergia a insectos: las abejas y las avispas son los principales insectos que provocan alergia, aunque, por supuesto, no son los únicos. Al picar inyectan una serie de sustancias tóxicas que generan una reacción en la piel. Sin embargo, en los casos más graves pueden llegar a provocar una reacción sistemática por todo el cuerpo.
Alergia al sol: este tipo de alergia suele provocar síntomas cutáneos como erupciones, eccemas y urticaria y se producen ante una exposición normal. En algunos casos se trata de una reacción frente a otro alérgeno que precisa de la radiación solar para provocarla.
Alergia al níquel: el níquel es un metal muy común que está en objetos tan cotidianos como las monedas, la bisutería o las llaves, y también en alimentos como el tomate o las judías. Esta alergia se manifiesta habitualmente a través de la dermatitis.
Alergia al látex: el látex es un material que podemos encontrar en productos tan comunes como los biberones o los chupetes de los bebés, en los guantes quirúrgicos o en los preservativos. Las reacciones ante este alérgeno suelen manifestarse en forma de dermatitis, pero también pueden provocar rinoconjuntivitis, angioedema, asma e incluso shock anafiláctico.
Alergia al anisakis: el anisakis se trata de un parásito frecuente en muchos pescados , sobre todo en la merluza, el bacalao, el rape, el bacalao y la sardina, entre otros. Los síntomas que provoca esta alergia son principalmente urticaria y angioedema, dolor abdominal, náuseas, vómitos y diarreas. En los casos más graves puede provocar un shock anafilactico.
Tipos de alergias en función de los síntomas
Alergias respiratorias: este tipo de alergia se produce cuando el agente que provoca la reacción entra en contacto con el paciente a través de las vías respiratorias, provocando los síntomas como tos o estornudos en el sistema respiratorio. Dependiendo de cómo sea esta reacción,pueden aparecer como consecuencias otras enfermedades asociadas como el asma o la rinitis alérgica. Los causantes principales de este tipo de alergia son el polvo, el polen, los animales y los hongos.
Alergias de piel: en este caso, la reacción alérgica se produce cuando el agente externo entra en contacto con la piel provocando síntomas como enrojecimiento, inflamación, picor, erupciones o ampollas entre muchas otras. Los alérgenos principales que las causan son los animales, los alimentos, los medicamentos, las picaduras de insectos, el sol, el níquel y los anisakis.
Alergias de ojos: las alergias oculares provocan síntomas como picor, ojos rojos, ardor en los ojos y lagrimeo, es decir, conjuntivitis alérgica. Esta patología puede presentarse sola o acompañada de otras enfermedades alérgicas como la rinitis. Algunos de los causantes principales de este tipo de alergias son el polen, los alimentos y el polvo doméstico.
Fuente: La Alergia
Imágenes (por orden de aparición): Robert S. Donovan/Flickr, dandeluca/Flickr y jlastras/Flickr.