¿Cómo funciona?
El parche está cubierto con más de un centenar de agujas diminutas, cada una del tamaño de una pestaña, donde cada una de estas microagujas están llenas de unidades de almacenamiento microscópicas de insulina y enzimas de detección de la glucosa, que liberan rápidamente su carga cuando los niveles de azúcar en la sangre son demasiado altos.
El estudio que se ha publicado "Proceedings of the National Academy of Sciences" (PNAS) cuenta que las primeras investigaciones del parche han conseguido disminuir, durante nueve horas, la glucosa en ratones con diabetes tipo 1 y aunque aún faltan ensayos en humanos es un primer paso muy importante en este nuevo avance.
En este sentido, los investigadores destacaban “La parte más difícil de la atención de la diabetes no son las inyecciones de insulina o los controles de azúcar en la sangre o la dieta, sino el hecho de tener que hacer todos ellos varias veces al día todos los días por el resto de su vida”, resalta Buse, director del North Carolina Translational and Clinical Sciences Institute (NC TraCS), por sus siglas en inglés, y expresidente de la Asociación Americana de Diabetes. “Si podemos conseguir que estos parches funcionen en las personas, será un elemento de cambio”.
Así trabajan en un parche que aseguran es fácil de usar y donde todo es personalizable en base al peso del diabético o la sensibilidad a la insulina, haciéndolo inteligente.
¿Cómo van a innovar?
Tras ver lo avances actuales, como las nuevas bombas de insulina o el páncreas artificial, donde en algunos de los casos puede haber lugar a error humano, estos investigadores se han centrado en emular a los generadores de insulina naturales del cuerpo, nuestras amigas las células beta.
Tras múltiples pruebas y ensayos, vesículas artificiales similares a las de las células beta (productoras de insulina). El resultado fue millones de estructuras similares a burbujas, cada una cien veces más pequeña que el ancho de un cabello humano. En cada una de estas vesículas, los investigadores insertaron un núcleo sólido de la insulina y enzimas especialmente diseñadas para detectar glucosa.
Aunque es muy técnico os dejo cómo explican el funcionamiento del parche: "En experimentos de laboratorio, cuando los niveles de azúcar en la sangre aumentaron, el exceso de glucosa se amontonó en las vesículas artificiales. Las enzimas, convirtieron entonces la glucosa en ácido glucónico, consumiendo oxígeno todo el tiempo.
La falta de oxígeno o “hipoxia” resultante, provocó que las moléculas hidrofóbicas NI se convirtieran en hidrófilas, haciendo que las vesículas se rompiesen rápidamente y enviasen insulina al torrente sanguíneo"
Una vez tenían estas “nanopartículas inteligentes de insulina” dispusieron más de un centenar de estas microagujas en una franja delgada de silicio para crear lo que es en sí mismo el parche.
Para comprobar su eficacia, los investigadores realizaron una comparativa en ratones con DM1.
A un conjunto de ratones les pusieron una inyección estándar de la insulina y les midieron la glucosa, que se redujo a niveles normales, pero posteriormente subió de nuevo hasta la hiperglucemia. En contraste, cuando los científicos trataron a otro grupo de ratones con el parche de microagujas, vieron que los niveles de glucosa en sangre se llevaron bajo control a lo largo de treinta minutos y se mantuvieron durante varias horas (hasta 9)
Tras estas pruebas continúan las investigaciones y aunque queda ver si en humanos es igual de eficaz, los primeros resultados son muy alentadores y parece ser que van por buen camino.
**Post basado en fuentes oficiales