Todos cometemos infinitos errores. Que no te sirva esto de excusa, por favor. La vida es un continuo aprendizaje y cualquier aprendizaje lleva asociado el error y el fracaso.
Claro, el tema sería no cometerlos, pero, ¡mentalízate! los vas a cometer. Vas a cometer errores de niño, de joven, de adulto, de alumno, de profesor, de trabajador, de jefe, de padre, de abuelo….
¡A ver, que levante la mano alguien que no haya cometido errores! Pues no, no veo ninguna mano, y no creo que exista nadie en el mundo que no los haya cometido. ¿Sabes quién comete errores?, el que hace algo, porque el que nunca hace nada no comete ninguno, bueno más bien comete el error más grande que puede haber: «no hacer nada». ¡Qué pena!, ¿no?
El fracaso es un peldaño hacia el éxito. Solo comete errores el que hace o lo intenta. El otro lógicamente no los comete.
Ese fracaso al que le tienes tanto miedo, ese error que crees que puede cometer, te curte, te hace fuerte, te hace pensar más y mejor. El éxito es un mal maestro. El fracaso te enseña más de ti mismo y del mundo que te rodea. El fracaso es parte del éxito.
El camino más corto y mejor, siempre se descubre después de haber “fracasado” en otros caminos. Pero la única forma de descubrirlo es salir al monte, ponerte a andar y tropezar, caerte y volver a levantarte.
No pasa nada si fracasas. El mundo es de los emprendedores y de los luchadores. A pesar de las posibles lágrimas, habrá que volver a empezar, contando con que tendremos más experiencia y los errores nos habrán enseñado a tomar mejores decisiones. Quien evita el fracaso, evita el éxito.
No tengas miedo al error o al fracaso. Cualquier empresario, descubridor, investigador, ha conocido el fracaso antes de llegar a conocer el éxito. Si hubieran abandonado, muchos de los inventos, medicinas o comodidades que tenemos a nuestro alrededor no existirían. El éxito es mayor si antes ha existido un fracaso.
Los errores son el paso más grande hacia el aprendizaje. No hay invento que haya llegado a su creación sin pasar por errores previos, ni muchas metas alcanzadas, ni éxitos conseguidos. El error forma parte de la acción, cualquier verbo que implique una acción conlleva el posible error: estudiar, trabajar, amar, enseñar, diseñar, fabricar... y, ¿dejarías de actuar por el posible error?
Todos tenemos miedo a hacer algo mal en algún momento, pero el pensar que puedas cometer un error, que todo sea un fracaso, no puede paralizarte, porque como decía en el párrafo anterior, el error más grande lo cometerás al quedarte inmóvil, quieto, pasivo, sin mover un dedo por si acaso. Eso sí que será un gran fracaso.
¡No, claro que no! El miedo, no te puede servir de excusa. Ser cobarde es uno de los mayores errores. Sí, claro que vas a cometer errores, pero que nadie te pueda echar en cara nunca el error más grande:
¡TÚ NO HICISTE NADA!
Muchas gracias por estar aquí y compartirlo. La buena comunicación nos hace crecer.