En el invierno suelen aparecer ciertos riesgos para la salud de las personas de la tercera edad. Incrementan las posibilidades de contraer ciertas enfermedades que pueden ser riesgosas para este grupo etario. A continuación te daremos unos consejos para cuidarte del frío en la tercera edad
Consejos para cuidarse del frío en la tercera edad
Gripe
Esta patología nos afecta a todos, pero en especial a las personas de la tercera edad, una gripe puede afectar muy seriamente tu salud.
Lo ideal para prevenir estas afecciones es:
Aplicarse la vacuna contra la gripe
No permanezcas en lugares cerrados o mal ventilados
Abrígate muy bien cuando salgas de paseo
Consume cítricos y alimentos que contengan vitamina C de esa manera aumentarás tus defensas.
Catarro
Un catarro mal curado puede devenir en bronquitis, pulmonía o neumonía. Para no contraer estas enfermedades que suelen ser muy graves. Debes poner mucha atención a estos consejos para cuidarte del frío en la tercera edad.
Es muy importante que:
Ante el menor síntoma de catarro comienza a cuidarte. Lo primero que debes hacer es abrigarte muy bien.
Ventila bien tu casa, deja abiertas las ventanas por 15 minutos para que el aire se renueve.
No bebas alcohol ni fumes
Consume alimentos sanos como carnes magras, pescado, frutas y verduras.
Si el catarro es leve haz inhalaciones con hojas o frutos de eucaliptos
Bebe mucho líquido en especial agua, infusiones y zumos de cítricos. Estos además te aportarán vitamina C.
Si notas que el catarro se agrava consulta de inmediato al médico
No te auto mediques
Combate el frio
Cuando el frio entra en el cuerpo, el organismo funciona mal, y crea el ambiente propicio para que las enfermedades aparezcan. Es por eso que uno de los consejos para cuidarte del frío en la tercera edad, es evitar que este se apodere de tu cuerpo.
¿Cómo combatir el frío?
Abrígate muy bien
Aliméntate debidamente
Calefacciona muy bien tu casa
Si activas tu circulación tu temperatura será estupenda. Puedes activar tu circulación:
Caminando a diario
Masajea tus pies y piernas con cremas hidratantes
Abriga muy bien tus manos y pies. Utiliza guantes y calcetines gruesos, estos pueden ser de algodón o lana.
No apliques calor directo a tus pies o manos.
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