Cambios generales de la vagina después del parto. Ya sea por el estiramiento natural o la episiotomía (corte realizado por el médico), tu vagina puede no permanecer igual o tener la misma sensibilidad después de un parto vaginal.
La vagina se vuelve más ancha. Después del parto es normal que la vagina quede un poco más abierta y suave. Es un efecto natural debido al estiramiento necesario para la salida del bebé. En ocasiones puede causar incontinencia urinaria temporal y afectar las relaciones sexuales. Tengamos en cuenta que además del estiramiento, suelen producirse micro-lesiones y magulladuras en las paredes vaginales.
Es posible acelerar la fase de recuperación si realizas ejercicios del suelo pélvico; estos ayudan a mejorar la sensación durante las relaciones sexuales, tonifican los músculos del piso vaginal/pélvico y previenen la incontinencia urinaria. Una técnica sencilla para hacer este tipo de ejercitación muscular es sostener la orina por unos segundos y luego relajarte, repitiendo el proceso varias veces. Una vez que sientas cuáles son los músculos que se tensan para detener la orina, podrás hacer las contracciones en cualquier momento durante el día. Se recomienda mantener las contracciones por unos segundos y repetir al menos 10 veces. Nota: Interrumpir la micción solo se recomienda para identificar qué músculos debes contraer, una vez que hayas practicado no debes seguir haciéndolo. (Ver: Ejercicios vaginales ¿por qué son tan beneficiosos?)
Por otro lado, el dolor del perineo es una queja común, especialmente en los casos donde se ha realizado la episiotomía. Aunque los analgésicos pueden ser una forma eficaz de aliviar este dolor, se debe tener precaución en las mujeres que amamantan. Consulta a tu médico sobre los medicamentos que puedes tomar. Recuerda que el mantenimiento de una higiene adecuada es muy importante para evitar infecciones en la zona de la herida.
Cambios en la vagina después del parto por cesárea. Los cambios en la vagina después del parto por cesárea dependen principalmente de si la mujer ha estado tratando de parir de forma natural antes de la operación. Las mujeres que pujan antes de la cesárea experimentan incomodidad y ensanchamiento vaginal en caso de que el bebé haya ejercido presión sobre el perineo, el cuello del útero y la vagina (especialmente si está cerca de coronarse), o el médico haya masajeado y estirado el área para facilitar el nacimiento a través del canal del parto. En caso de que la mujer haya sido sometida a la cesárea desde un inicio, la afectación vaginal será practicamente nula.
Independientemente del tipo de parto, los médicos recomiendan evitar las relaciones sexuales, así como la inserción de tampones o cualquier cuerpo extraño durante al menos 6 semanas después del parto para prevenir cualquier tipo de infección.
¿Puede tu vagina volver a la forma original? Ahora que estás familiarizada con los cambios que ocurren en la vagina después del parto, te preguntarás si es posible que vuelva al estado que tenía antes del parto. La buena noticia es que la vagina tiene una elasticidad notable y es capaz de volver a su estado anterior. Los resultados serán mejores si pones en práctica los ejercicios para fortalecer el piso pélvico.
Consejos para tener relaciones sexuales después del parto. Tener relaciones íntimas después del parto podría ser un desafío mental y físico para algunas mujeres. Ten en cuenta los siguientes consejos porque pueden ser de gran ayuda.
Disfruta más de los juegos previos y tómate tu tiempo antes de pasar al coito.
Prueba el uso de lubricantes para combatir la sequedad vaginal.
Prueba diferentes posiciones hasta que encuentres la más cómoda.
Detente si el sexo se vuelve incómodo.
Artículos de interés: 3 mitos sobre las vaginas apretadas/anchas; Cómo afecta el embarazo a la salud vaginal
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