Es el aumento de la temperatura de las personas por encima de los 37 grados, la cual es la temperatura más alta que puede tener una persona sana.
¿Qué la provoca?
Una enfermedad puede ser la causa de este repentino aumento de temperatura.
Ese aumento, es una respuesta del organismo ante agentes externos como virus cuando realizan un ataque a nuestro sistema.
En su intento por sobrecalentar los virus para matarlos, el cuerpo reacciona de esta manera.
Por supuesto que esta reacción de protección para nuestro cuerpo conlleva consigo algunos síntomas adicionales, como frío, mareo, vómito, debilidad y hasta diarrea.
Por ello, es muy importante entender este mensaje del organismo y analizar que puede ser lo que ha causado este problema.
¿Cómo controlar la fiebre?
Existen algunos métodos sencillos que puedes tomar para la fiebre, con los que puedes controlar este descontrol de la temperatura, estos son los más conocidos.
Agua en compresas
Es recomendable que apliques compresas frescas en la frente y cuerpo de la persona con temperatura, para que su cuerpo vaya retomando su temperatura normal.
Probablemente sienta demasiado frío porque su cuerpo se ha destemplado, debe resistir un poco y dejar que la temperatura se estabilice.
Bebidas frescas
El sobrecalentamiento del organismo es total e incluye todos los órganos. Por ello, es recomendable que la persona que padece este problema beba líquidos frescos para comenzar el proceso de restauración de la temperatura desde el interior.
Además de ello, el cuerpo pierde gran cantidad de líquidos mientras suda por el aumento de temperatura y aún más si este problema viene acompañado de vómito y diarrea.
Lo que puedes tomar para la fiebre y recuperar los líquidos es consumiendo toda el agua que sientas necesaria, probablemente tengas una ligera deshidratación, así que es recomendable también tomar sueros.
Descansar
Tu cuerpo se encuentra debilitado por todos los esfuerzos que ha hecho para eliminar los virus, así que un buen descanso será reparador y podrá tener una recuperación más pronta.
Sueros naturales que puedo tomar para la fiebre
Los sueros, son el mejor remedio que puedes tomar para la fiebre, ya que aportan vitaminas y minerales que se han perdido en la sudoración, vómito y diarrea.
Aquí te comparto algunos tipos de sueros caseros que te servirán para recuperarte.
Suero de limón casero
Ingredientes:
1 litro de agua
Jugo de 5 limones
1 cucharadas de sal
1 cucharadas de azúcar
1 cucharada de bicarbonato de sodio
Modo de preparación:
En una jarra con el agua, vierte el jugo de limón, la sal, la cucharada de azúcar y el bicarbonato.
Bebe durante el día al menos 4 vasos.
Agua de coco
El agua de coco, es considerado un suero natural, que además de tener muy buen sabor, tiene grandiosos resultados.
Repone los electrolitos y minerales perdidos por el cuerpo durante el proceso de deshidratación, además de aportar gran cantidad de vitaminas, que no solo te ayudarán a recuperarte pronto, sino también te dará mucha energía, que había sido perdida en el proceso.
Sueros de sabores
Si prefieres los sueros de sabores, ya que son mucho más antojables y fáciles de beber, solo es necesario que agregues jugo de la fruta natural que prefieras para cambiar el sabor de tu bebida.
Debes moler en la licuadora, y colar para extraer su jugo.
Estos son muy recomendables cuando son los niños los que están sufriendo de fiebre.