Se la conoce también como “cocina sin fuego” precisamente por preparar los alimentos sin la acción del mismo. De esta manera, los alimentos conservan la máxima calidad de nutrientes, al no ser deteriorados por la acción del calor. Se sabe que, a partir de 45º, los alimentos empiezan a perder sus propiedades, especialmente las proteínas, las vitaminas y las enzimas.
¿Qué se come en la dieta RAW?
La dieta RAW basa su alimentación en productos naturales, crudos y orgánicos. Alimentos como la fruta, verdura, semillas, frutos secos, algas marinas, aceite de oliva virgen…
Estos alimentos son los que nos ayudan a mantenernos sanos y libres de enfermedades. por eso, es una alimentación que viene directamente de la naturaleza cultivados de manera natural, o bien orgánicamente.
Puede que a algunos les parezca que este tipo de dieta es insuficiente para el estilo de vida actual, pero realmente las posibilidades dentro de este estilo de vida son ilimitadas y y muy beneficiosas. Además de las ventajas sobre la salud, el principal beneficio de la comida RAW es cómo hace que te sientas. Conecta a las personas con la naturaleza y el espíritu de cada ser humano. Aumenta también los niveles de energía y concentración.
Beneficios de la dieta RAW
De entre los inmensos beneficios de adoptar el estilo de vida RAW, podríamos destacar los siguientes:
Alimentarse a base de plantas aporta grandes beneficios a la salud, contribuye a una buena desintoxicación, aumenta la energía y fortalece el sistema inmune.
Los alimentos de este tipo de dieta son altamente alcalinizantes, con lo que nos sentiremos mejor tanto física como mentalmente.
Al comer únicamente lo que produce la tierra de manera ecológica podríamos decir que, moralmente, nos sentiremos mucho mejor con nosotros mismos al saber que no provocamos sufrimiento a ningún ser vivo para poder comer.
Contribuye a aumentar el nivel de concentración.
Contribuye a perder peso, a envejecer más lentamente y a tener un aspecto más saludable; ya que no consumiremos grandes cantidades de almidón, azúcares refinados ni grasas.
Previene y ayuda a curar enfermedades como la diabetes, alergias, colesterol y problemas digestivos.
Ayuda al medioambiente: la industria alimenticia utiliza pesticidas, fertilizantes sintéticos, y herbicidas que dañan tanto nuestra salud como el medioambiente.
Al utilizar productos orgánicos y frescos, estamos minimizando la cantidad de recursos naturales utilizados. De esta manera favorecemos a los campesinos locales que apuestan por el desarrollo sostenible.
Si os ha interesado el estilo de vida RAW y queréis saber cómo empezar a adpotarlo, os dejamos un vídeo que os ayudará.
Fuente: este post proviene de TuEcoBlog, donde puedes consultar el contenido original.
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