Estamos desde hace más o menos un mes en primavera y a muchos nos entran ganas de cuidarnos… “un poco más de lo habitual” , para que cuando el calor nos incite a despojarnos por fin de las chaquetas, nos veamos en mejores condiciones, si ello es posible…
Fuera de bromas, con la inminente entrada del buen tiempo, nuestros hábitos alimentarios comienzan a variar un poquito, tal vez nos apetecen otro tipo de preparaciones, de modo que en esta ocasión propongo un plato, como casi siempre, muy sencillo de elaborar y que a aquellos que deseen regular su alimentación les puede ayudar, ya que su valor calórico no es elevado.
El protagonista va a ser, el pimiento rojo, que de octubre a junio se encuentra en el mejor momento para su consumo.
Resaltar de su composición nutricional, su alto contenido en vitamina C, muy por encima de frutas como la naranja, esta verdura favorece la absorción del hierro de los alimentos en el tubo digestivo. Destaca también por su aporte en minerales como calcio, magnesio y potasio, además de vitamina B6
Su contenido tanto en grasas como en proteínas es muy bajo y los hidratos de carbono que contienen nos facilita la ingesta de fibra, por todo ello su consumo es muy adecuado.
Para la receta, en esta ocasión utilizo pimientos del piquillo asados de bote, es una opción saludable, si no dispones de tiempo para asar en casa…que resulta un poquito más engorroso.
Yo recomendaría, que si fuese posible, eligiésemos unas buenas conservas de estos pimientos del piquillo, es decir que nos aseguremos que estas provengan de España, en referencia siempre a producto local, que los ingredientes sean simplemente pimientos del piquillo asados, un poco de sal y realmente no necesitarían nada más.
Existen muchas marcas que intentan confundirnos con la procedencia, pues muchas veces nos confunden con el lugar de envasado, probablemente aquí y su procedencia, en el caso de la imagen lo podemos observar, Perú.
Ademas de añadirles azúcar, cuando realmente no es necesario.
Una vez aclarado el tema del etiquetado, pasemos a la receta.
Recomendaciones finales
Esta sencilla receta se puede usar como un acompañamiento perfecto, desde el punto de vista nutricional, de un buen plato de lentejas, pues para absorber el hierro que estas legumbres poseen, es necesario acompañarlas de vitamina C y como os he comentado el pimiento es una gran fuente de esta vitamina.
Así que ya tenéis un menú para vuestra próxima comida: lentejas con arroz, otra combinación excelente (cereal + legumbre), y pimientos del piquillo rellenos de atún.