¿Pero qué ocurre si el deterioro en nuestros cuerpos es debido a un accidente o una enfermedad? En estos casos, muchas veces los cambios en las funciones del cuerpo no serían graduales y consecuentes de la edad que tenemos.
La reacción lógica, sería seguramente sería la de sufrir un shock por los cambios que haya sufrido nuestro cuerpo; pero bien dicho está que "la vida es una sola" y deberíamos vivirla de la mejor manera posible, pese a las circunstancias que nos toque vivir.
Pues bien, una manera sana de enfrentar estas alteraciones en nuestras vidas es asumir que no todo sale como esperamos que suceda. Así, es importante, en base a este nuevo modo de pensar, seleccionar cuáles tareas podemos seguir realizando y con cuáles necesitamos asistencia; ya que por diversas razones, muchas personas han quedado imposibilitadas de realizar quehaceres a los que habían estado acostumbradas.
En este caso ,y después de haber "domado" nuestros sentimientos, afrontando las circunstancias y haciendo uso de la resiliencia que la mayoría de los seres humanos llevamos escondida, daremos paso a la versatilidad que nos caracteriza y trataremos de seguir los siguientes pasos:
1- Nunca negar lo ocurrido: Uno de los errores más peligrosos y comunes para la salud emocional, es no admitir
la situación traumática que deterioró nuestro organismo.
2- Desde este punto podremos investigar, "googlear", asesorarnos con los profesionales adecuados cómo podemos recuperar parte ( o totalmente) las funciones que hayamos perdido. Ya sea con buenos psicólogos (pues la parte anímica es fundamental para sostener la rehabilitación), quinesiólogos, neurólogos,etc. y así disponer nuestra buena voluntad para alcanzar la mayor recuperación posible ( si no lo hacemos, nadie podrá hacerlo por nosotros).
3- Ésto no es magia; todos tenemos nuestros altibajos. Por lo tanto, debemos comprender que quizás pasemos tiempos de desesperanza y desazón. Pues bien, es bueno también aceptar que habrá períodos como éstos, lo que no debemos permitir es que duren demasiado tiempo. Para éllo es sumamente necesario aprender a ser agradecidos.
4-Valorar cada logro, por pequeño que parezca ( la disconformidad y la ansiedad son nuestros mayores enemigos). Debemos ser sensibles a cada "pequeño-gran avance que tengamos" y apreciarlo.. Cada vez que sintamos que estamos estancados, deberíamos compararnos a nosotros mismos con cómo estábamos unos meses atrás. Y bien, si consideramos que en algunas tareas no hemos tenido mejoría, enfocarnos en las que sí tuvimos: A NO DESFALLECER Y A SEGUIR TRABAJANDO !!!
5-Pensemos y reconozcamos, que después del hecho que cambió nuestros cuerpos, estábamos peor que como estamos hoy. Tendemos a añorar el tiempo anterior al incidente, y ésto nos juega en contra; hasta puede llegar a desesperarnos. Plantémonos pues en la realidad, tratando de apuntar a aquéllo que SÏ, con dificultad o no, podemos hacer .
Es fundamental agradecerler a la VIDA por una NUEVA OPORTUNIDAD...PODREMOS TENER DÍAS DIFÍCILES, PERO JAMÁS DARNOS POR VENCIDOS !!!