Mantenerse en equilibrio: miedo y esperanza

El miedo es una sensación inherente al ser humano, una reacción primitiva e instintiva.  Ante una amenaza, se activan los sistemas de alerta y defensa, que preparan al cuerpo para hacer frente al enemigo, o huir. El ritmo cardíaco se dispara, aumenta la presión sanguínea, los músculos se contraen y se acelera la respiración.

Sentir miedo no solo es inevitable, sino que es una herramienta fundamental para la supervivencia. Ahora bien, esta poderosa sensación se convierte en un problema cuando la amenaza no es en realidad un peligro, sino el fruto de nuestros pensamientos negativos. Este tipo de miedo nos paraliza, nos limita y en definitiva, nos impide ser felices.



Unplash / Pixabay

Gracias al miedo conducimos con mayor precaución, miramos a ambos lados de la carretera antes cruzar o tenemos cuidado si estamos caminando por la montaña cerca de un precipicio. En estos momentos, el miedo es necesario y nos ayuda a ser precavidos y sensatos. ¿Cuándo se convierte el miedo en tu enemigo?

Cuando ante algo que deseas o debes hacer, comienzas a enviarte una lista infinita de mensajes a ti mismo cargados de negatividad: “no seré capaz de hacerlo bien”, “me rechazarán”, “yo no valgo para eso”, “me voy a equivocar”.  La imaginación puede jugarnos malas pasadas cuando se construye con elementos negativos. En estos momentos solemos imaginar el peor de los escenarios y entonces la angustia se apodera de nosotros/as y se activa la respuesta de huida.

El miedo como trampa


Detrás de un miedo excesivo, a menudo se esconde una baja autoestima. Pensar que no eres capaz de afrontar determinadas situaciones lo convierte en una realidad, porque no lo intentas. Esta actitud no permite que se abran a tu alrededor nuevas oportunidades.

El miedo toma forma de excusa cuando, ante un reto, dudamos sobre nuestras propias capacidades. Nuestra mente comienza a buscar multitud de justificaciones sobre por qué no podemos afrontarlo. El cerebro elabora todo tipo de explicaciones lógicas para justificar que no somos capaces de abordar el problema y nos lo creemos, ya que nadie nos engaña tan bien como nosotros mismos.

Para evitar el dolor que imaginamos que vamos a sentir, nos refugiamos en excusas que resultan muy reconfortantes en el momento pero que, sin embargo, nos debilitan en nuestra carrera de fondo, reafirmando nuestra idea sobre nuestra poca valía.

Qimono/Pixabay

Es muy frecuente la tendencia a explicar nuestros fracasos a través de causas externas a nosotros, como haber tenido una infancia difícil, que nuestra pareja nos haya abandonado o haber pertenecido a una familia con pocos recursos económicos. También algunas personas utilizan con frecuencia justificaciones de tipo “si fuese más alto…”, “si tuviera mejor aspecto físico…”. Escudarse en estos pensamientos solamente consume energía sin aportar nada positivo.

Existen multitud de miedos: al fracaso, al éxito, a estar solo, a los cambios… muchas veces esto conduce a situaciones indeseadas como dependencias, fobias, malos sentimientos hacia los demás o inseguridades constantes. Quizá tuviste una mala experiencia en el pasado que hace que salten tus alarmas si se presenta una situación similar, aunque no tenga por qué repetirse lo que te ocurrió y sea de hecho bastante poco probable.

Aprender a convivir con el miedo, identificarlo y comenzar a eliminar las “falsas amenazas de peligro” pasa por ir afrontando poco a poco lo que nos asusta. Sea cual sea el tipo de miedo infundado que tengamos, solo hay una manera de vencerlo: dejar de huir. Una vez que miras al “monstruo” a los ojos, este pierde todo su poder.

Silviarita/Pixabay

Consejos para gestionar tu miedo


Escribe en detalle cuáles son tus miedos para aclarar tus ideas y, a continuación, escribe posibles soluciones para cada caso.

Visualiza tus logros o la resolución de un problema. Imaginar en detalle cómo afrontas con éxito una situación que te asusta o superando un reto te acerca a conseguirlo.

Fija pequeños objetivos, como enfrentarte cada semana a algo que te asusta pero que desearías hacer, como algo que requiera hablar en público, hacer un viaje solo/a o ponerte esa prenda llamativa que te gusta y te da vergüenza usar. Una vez vayas cumpliendo tus objetivos, por pequeños que sean, irás ganando confianza en ti mismo/a y comprobarás que eres mucho más valiente y fuerte de lo que creías.

Comienza a pensar de manera positiva para que tus acciones también lo sean.

Practica meditación. La relajación y la meditación son recursos para calmar la mente y encontrar armonía en nuestro interior.

¿Has probado el yoga? El yoga nos ayuda a conectar cuerpo y mente y a sentirnos más relajados y en paz con nosotros mismos.

Cuídate. Alimentarte de forma saludable, cuidar tu apariencia y hacer algo de ejercicio de manera constante, elevará tu estado de ánimo y subirá tu autoestima.

Consulta libros y artículos sobre crecimiento personal. Leer puede ayudarte a comprender muchas cosas y motivarte a pasar a la acción.

No te critiques. A menudo, hay personas que se machacan a sí mismas de manera constante, juzgándose y sentenciándose como no harían ni con su peor enemigo. Tratarse a uno mismo con amabilidad es una de las máximas de la felicidad.

El sentido del humor como arma. Muchas veces nos tomamos ciertas cosas con demasiada seriedad y damos importancia a detalles que no la tienen. Reírse de las situaciones y de uno mismo y rebajar el estrés con humor es una manera saludable de sentirse mejor.

Freeimages9/Pixabay

Recuerda…


Superarte a ti mismo/a y curar el miedo depende de ti y es el único camino hacia el bienestar y satisfacción personal. No olvides que por muy difícil que sea tu situación y por mucho sufrimiento que sientas, siempre hay alguien que lo está pasando aún peor. Piensa en personas que bajo situaciones verdaderamente al límite han sabido sacar lo mejor de sí mismos y afrontar con valor los obstáculos. Estas personas inspiran y hacen que veamos nuestros problemas desde una nueva perspectiva.

Si tomamos consciencia de que nuestros pensamientos son los responsables de nuestras emociones, entenderemos la importancia de empezar a cultivar pensamientos positivos y constructivos que nos hagan sentir más fuertes y seguros. Ser más fuerte que el miedo irracional es la manera de liberarse y encontrar el equilibrio que nos permita emprender con energías renovadas el camino de constante aprendizaje y cargado de pruebas que es la vida y además, disfrutar de él.

Así, la meditación podrá permitirte parar, y experimentar de primera mano los beneficios de llevar una vida consciente y saludable, atendiendo a tus emociones y pensamiento. Y de esto mismo trata el método Crear Salud, que te ayudará a establecer nuevos hábitos en tu día a día, no solo para que empieces a meditar, sino para aprender a nutrirte adecuadamente y llevar una vida activa.

Anímate y prueba la app Siente – que puedes descargar aquí – y se convertirá en tu mejor compañera para guiarte en el camino de la meditación. Se trata de una metodología muy sencilla, que te abrirá las puertas del mindfulness y la psicología positiva, para mejorar tu bienestar y en definitiva, ser más feliz.

   

 
Fuente: este post proviene de Crear Salud, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado:
¿Qué te ha parecido esta idea?
Esta información nunca debe sustituir a la opinión de un médico. Ante cualquier duda, consulta con profesionales.

Esta idea proviene de:

Y estas son sus últimas ideas publicadas:

Estamos atravesando momentos complicados en diferentes partes del mundo. Es verdad que realmente eso ya ocurre desde hace muchos años en muchos lugares que, como no son foco de la noticia, parece que ...

Aunque cada vez más personas saben qué es meditar, muchas todavía tienen dificultad para agregar ese nuevo hábito en sus vidas y sacar provecho de esa técnica. En primer lugar, retomemos una definició ...

Recomendamos

Relacionado

LA MÚSICA DE LA FELICIDAD

Todos hemos tenido miedo alguna vez. El miedo es una emoción, generalmente adaptativa, que prepara a nuestro cuerpo para huir o defenderse de algo que nos resulta amenazante. Resulta necesaria y las personas que no la sienten pueden poner en riesgo su vida. El miedo se activa en la amígdala, la parte más primitiva e instintiva de nuestro cerebro y, gracias a éste, los antiguos homínidos eran capac ...

confianza siente amenzazas ...

El miedo ha sido un temido compañero a lo largo de la historia de la humanidad. Es prácticamente imposible encontrar un ser humano que no haya sentido miedo, por lo menos en ciertas ocasiones. En cualquier caso, todos queremos librarnos de nuestros miedos y luchamos para conseguirlo. Sin embargo, existe la posibilidad de abrazar ese miedo y aprender a convivir con él como si de nuestro huésped se ...

aceptación compasión confianza ...

El miedo es una respuesta natural ante el peligro que se caracteriza por una sensación de angustia. El peligro que provoca puede ser imaginario o real, y no siempre tiene el mismo origen ni se manifiesta de la misma manera. Por eso podemos hablar de que existen diferentes tipos. La sensación de miedo puede ser debida a lo que está sucediendo en ese momento o, quizá, por algo que pasó o que pensamo ...

confianza precisión siente ...

El miedo es una emoción que nos sirve como una respuesta natural de alarma, y nos puede hacer huir o enfrentarnos, aunque también paralizarnos. Nuestro cuerpo responde de inmediato y aparecen una serie de señales que se producen en nuestro cerebro en relación a cómo estamos percibiendo la situación. ¿Te resulta desagradable experimentar miedo? Generalmente esta emoción causa un gran malestar, ante ...

confianza siente aceptar emociones ...

Aunque cada vez hay más información acerca de los beneficios de la meditación, aún hay muchos de ellos que no se conocen. En esta ocasión, vamos a explicarte cómo la meditación puede ayudarte a la hora de hablar en público, ya que esta es una de las ventajas menos conocidas. ¿Qué es el mindfulness? El primer paso para entender cómo meditar puede ayudarte a hablar en público es conocer la técnic ...

odontofobia miedo al dentista dentista ...

Hay miedos y fobias que se arraigan en la personalidad desde la infancia: ¿Quién no ha temido alguna vez adentrarse en el mar cuando no hacemos pie? ¿Quién no se ha sobresaltado viendo a alguien querido cerca de un precipicio? ¿Y qué decir de la oscuridad? ¿Y de los ascensores? De entre estos miedos hay uno que ataca a mucha gente una vez al año más o menos, el miedo al dentista. Para que esto no ...

pareja mindfulness prejuicios ...

Muchas personas tienen miedo al que dirán. Aquí te dejo algunos consejos para superarlo. Realmente el sentir temor de lo que digan los demás de nosotros esconde una necesidad de aprobación. Buscamos la aprobación de los demás y como en el fondo sabemos, -aunque no somos realmente conscientes de ello-, que eso es imposible, pues nos sentimos mal. Es imposible agradar a todo el mundo. Alguien dijo ...

fundamentos precisión siente ...

Por muy valientes que seamos, el miedo es una emoción que experimentamos todas las personas, ya que es útil y adaptativa para el ser humano. Es habitual que tengamos temores, y que muchas cosas las afrontemos pese a esos temores. Sin embargo, existen miedos irracionales que limitan gravemente nuestra vida cotidiana. Es importante que aprendamos a controlarlos, pues les estamos dando el poder para ...

confianza fundamentos siente ...

Actualmente los trastornos de pánico son una de los principales consecuencias de una ansiedad prolongada e intensa, que incluso acaba cronificándose con el tiempo. El miedo es un elemento especialmente relevante en este trastorno, pero si esta emoción es adaptativa y necesaria para nuestras supervivencia, ¿cómo la hemos convertido en algo que nos causa tanto sufrimiento? Según indican las investig ...

odontofobia miedo al dentista miedo a visitar al dentista ...

La Odontofobia, o miedo irracional a la figura del dentista, afecta al 15% de la población, según la OMS. Este miedo no siempre tiene que ver con una experiencia negativa previa, esto se da en una mínima parte de los casos, sino que generalmente se asienta en un temor injustificado a sentir dolor. Este temor irracional “lleva a muchas personas a no realizar la revisión periódica por ese mied ...