Contrario a lo que muchos creen, las relaciones sexuales no forman parte de las cosas que debes evitar en el embarazo. La actividad sexual es buena para mantener a la pareja unida, feliz e incluso favorece el trabajo de parto en las últimas etapas. Pero hay situaciones en las que el sexo debe evitarse durante un plazo determinado según lo indique un médico, por ejemplo:
Ha sufrido una hemorragia vaginal sin explicación (esto es diferente del manchado después del sexo).
Está expulsando un poco de líquido amniótico, este es el líquido transparente y acuoso que rodea y protege al bebé en el útero.
El cuello uterino presenta una apertura prematura (incompetencia cervical).
Se tiene un embarazo gemelar de riesgo
Tiene un historial de aborto involuntario.
¿Qué causa el manchado vaginal después del sexo?
Durante el embarazo se produce un aumento del riego sanguíneo hacia el útero para garantizar el buen desarrollo del futuro bebé. En adición el cuello uterino se vuelve más suave y en consecuencia, es más fácil que se rompan pequeños vasos sanguíneos alrededor de la vagina y el cuello uterino por la fricción. Aunque estas micro-lesiones pueden provocar manchado hasta por 2 días después del acto sexual, no van a afectar al bebé porque está rodeado y protegido por el líquido amniótico más arriba en el útero.
A pesar de no estar relacionado con las relaciones sexuales, el manchado puede ocurrir cuando se aproxima la fecha de parto, a medida que se expulsa el tapón mucoso del cuello del útero. Tener relaciones sexuales durante esta etapa puede llevar a la suposición errónea de que el sexo ha causado la hemorragia.
¿Tener relaciones sexuales durante el embarazo puede causar aborto involuntario?
Aunque la actividad sexual hace que el útero experimente contracciones durante el orgasmo, no afecta al bebé en absoluto, ya que está protegido en su saco amniótico.
Otras causas de sangrado vaginal durante el embarazo
Existen causas más complejas para un episodio de manchado vaginal durante el embarazo, no asociadas a la actividad sexual.
Durante el primer trimestre el manchado puede ocurrir debido a un embarazo ectópico, cuando el feto se implanta fuera del útero; o en presencia de un embarazo molar, cuando la placenta se convierte en una masa de quistes y el embrión puede ser inexistente o estar mal formado. Ambos casos pueden provocar la expulsión del embrión y por tanto, causar sangrado vaginal.
En el segundo y tercer trimestre, la placenta previa es la causa más común de sangrado. En este caso la placenta se encuentra lo suficientemente baja como para bloquear el cuello uterino. Normalmente debe estar ubicada en la parte superior del útero. También existe el desprendimiento de la placenta, cuando la placenta está perdiendo su conexión con la pared uterina. La placenta es responsable de proporcionar oxígeno y nutrientes y la eliminación de los residuos para su bebé. El manchado o sangrado debe verse como una señal de alerta temprana antes de que sea demasiado tarde.
¿Cómo puedo evitar el manchado después del sexo durante el embarazo?
El uso de protección o de lubricación ayuda a reducir la fricción y por tanto reduce el riesgo de que las paredes vaginales y cervicales resulten erosionadas durante las relaciones sexuales. Ciertas posiciones sexuales, como acostarse de lado o el sexo anal, pueden reducir las posibilidades de fricción vaginal. Algunas mujeres prefieren no involucrarse en las relaciones sexuales durante el embarazo, pero otras tratan de practicar alternativas que sean mutuamente satisfactorias.
A pesar de que el manchado vaginal puede ser una falsa alarma, siempre es mejor ir a lo seguro y consultar a un médico. Se recomienda hacer citas regulares durante el embarazo, en lugar de esperar por si surge algún problema. A veces cuando aparecen los síntomas ya es demasiado tarde para solucionar un problema.
Recuerda que experimentar un aborto involuntario no significa que eres propensa a perder los bebés. El siguiente embarazo probablemente sea normal. Sólo las mujeres que tienen 3 abortos involuntarios consecutivos son propensas a sufrir un nuevo aborto.
Por último, no te sientas culpable si sufres un aborto espontáneo cercano a los días en que has tenido relaciones sexuales. Seguramente esa no ha sido la causa, la mayoría de las veces sucede por factores que no se pueden controlar, como la genética.
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