Las semillas chia (salvia hispánica) provienen de un cultivo mexicano, que utilizaban en la época pre-hispánica. Esto ha convertido a la semilla chia en uno de los alimentos más importantes en esa zona de América.
El consumo de las semillas chia aporta gran cantidad de beneficios para nuestra salud, gracias a su gran cantidad de propiedades que aportan nutrientes muchas veces faltantes en una dieta diaria. Dentro de estos nutrientes los porcentajes con los que cuentan las semillas chia son un 20% de proteína de origen vegetal, un 40% de aceite, un 25% de fibra soluble entre muchos más. Hay que destacar que los aceites que contiene están formados por Omega 3,6 y otros ácidos fundamentales para la salud que ayudan al metabolismo y a disminuir el colesterol y triglicéridos de la sangre en general.
Además, las semillas chia contienen vitaminas como el fósforo, cobre, manganeso, zinc, calcio o potasio.
Debido a su composición en proteínas (19% a 23% de proteína en peso) proporcionan todos los aminoacidos esenciales que nuestro organismo necesita. Según los nutricionistas, estas semillas contienen más proteínas que otras alternativas de grano. Al poseer tan alto nivel proteínico, contribuyen al crecimiento muscular.
Poseen en calcio el equivalente a 5 veces más que la leche de vaca, y junto con el boro que nuestro cuerpo necesita para absorber el calcio, nos ayudan a tener unos huesos fuertes y saludables.
El calcio presente en las semillas chia es mucho más fácil de digerir que el de la leche, lo que las convierte en una alternativa ideal para aquellas personas que sufran intolerancia a la lactosa.
El boro también ayuda a aumentar los niveles de estrógenos de manera natural.
Las chia son la fuente vegetal más rica en Omega 3 antes que las semillas de lino, con el 60% de ácidos grasos Omega 3. Ayudan a nuestro cuerpo a combatir los desequilibrios que pueda tener y por lo tanto a mejorar nuestra salud mental y física en general. Los ácidos grasos esenciales promueven la transmisión nerviosa eficiente y estimulan el cerebro.
Un consumo constante de semillas chia en nuestra dieta diaria nos ayudará a reducir considerablemente el colesterol, bajar de peso ya que nos reducirá el apetito, aumentar las defensas en general, mejorar la diabetes y todos sus síntomas así como también una mejora en la función del hígado, la movilidad muscular, articulaciones,y aumentar los niveles de energía, concentración, así como una mejora en el funcionamiento del cerebro.
Cabe destacar también los poderes de antioxidante y antiinflamatorio que ayudará a prevenir otras enfermedades.
Las semillas chia se pueden consumir al natural, en una cantidad recomendada de una cucharada al ras. También se puede colocar en agua o zumo y realizar con ella gelatinas o agregarlas directamente en ensaladas, panes, cremas o cualquier otro alimento que pueda ir mezclado con semillas y que no altere su sabor original.
La asimilación de las semillas chia es muy rápida lo que hará que sus beneficios se puedan observar rápidamente una vez que se empieza a adaptar al consumo a diario.
Con todos estos beneficios solo hace falta que des el paso y adoptes las semillas chia y sus excelentes propiedades como uno de tus alimentos de preferencia en el hogar.
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