Hoy vamos a conocer más a fondo una fruta muy habitual en nuestros hogares y realmente rica y sabrosa, la pera.
Históricamente, podemos decir que el cultivo de perales procede de las regiones de Europa oriental y Asia occidental, y se remonta incluso a tiempos anteriores a la actual era cristiana.
Como sabéis, la variedad de peras es enorme, se habla de más de 30 tipos de pera conocidos en el mundo, aunque en España algunas de las más conocidas son la Blanquilla, Ercolini, Limonera, Conferencia, Buen cristiano William"s, Barlett, De Roma o Tendral de Valencia, entre otras.
Según la necesidad de frío que tengan para madurar se pueden diferenciar entre peras de invierno, necesitan mucho frío y peras de verano, que no lo necesitan.
En la cocina, la pera es una fruta que se usa principalmente como postre, pero también se usa en platos de repostería, en mermeladas y compotas e incluso en algunas bebidas, tales como la sidra.
En cuanto a su composición, la pera, como no podía ser menos, es una fruta mayoritariamente compuesta por agua (alrededor del 85 % del total). El segundo componente más importante son los hidratos de carbono (14 % del total), de los cuales una parte muy importante son fibra. Las grasas son inexistentes en esta fruta, por lo que es perfecta para mantener la línea. Su contenido en proteínas también es muy bajo.
En el apartado de minerales, la pera nos aporta sobre toda una gran cantidad de potasio, y en menor cuantía fósforo, calcio y magnesio.
Por último, no nos podemos olvidar de las vitaminas que contiene la pera, entre las que destaca por encima del resto la vitamina C. Ya sabéis que ésta es común también en los cítricos por ejemplo. También contiene cantidades más pequeñas de vitamina B3, B5 y B6.
Con todas estas características, la pera es una fruta muy recomendable y que nos ayuda a reducir los niveles de colesterol, o a combatir enfermedades como la diabetes, hipertensión arterial o afecciones cardiovasculares.
Además, como sabéis, el potasio (muy presente también en el plátano) ayuda a prevenir calambres y lesiones, y también es buena para la reparación de tejidos gracias a su alto contenido en vitamina C.
Como veis, a parte de que es una fruta con mucho sabor y fácil de comer, nos beneficia mucho su consumo.
¿Qué os parece la pera? ¿Tenéis alguna variedad preferida?
Fuente: este post proviene de HortoGourmet Gastronomía y Comunicación, donde puedes consultar el contenido original.
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