El cáncer es una de las palabras más aterradoras que cualquier persona pueda escuchar, ¿no es así?
Cuando la gente piensa sobre el cáncer por lo general lo asocian al peor de los casos: La muerte.
En cambio, cuando piensan en el sobrepeso u obesidad que tienen, nunca suelen pensar en la muerte.
Por lo general piensan en cuestiones como el colesterol alto, presión arterial alta y en el peor de los casos, el mayor riesgo es sufrir diabetes o enfermedades del corazón.
Nada ello parece poner en peligro la vida.
Sin embargo la obesidad está siendo vinculado cada vez más y más a un aumento de riesgo de cáncer, especialmente cáncer de colon.
A menudo, cuando pensamos en la obesidad pensamos en términos de la imagen corporal.
Inconscientemente nos comparamos con los modelos delgados de las pasarelas.
Lo que si lugar a dudas suscita sentimientos emocionales de insuficiencia, y es bastante molesto comprender que nosotros mismos nos damos lastima.
Tenemos que empezar a pensar en la obesidad como un término médico que afecta a nuestra salud de muchas maneras diferentes.
Así se ve una célula de cáncer
La obesidad se mide por el índice de masa corporal que compara más o menos la altura de una persona en relación a su peso.
En general, un IMC (Indice de Masa Corporal) más alto indica una mayor cantidad de grasa corporal.
Si alguien tiene un IMC de 18 a 24,9 se considera que esta en un peso normal.
Entre el 25 y 29,9, caen en la categoría de sobrepeso. Si el IMC de una persona es mayor de 30 son considerados obesos.
Obesidad e incidencia de cáncer de colon
Más y más investigaciones se están llevando a cabo para entender la relación exacta entre la obesidad y el aumento de la incidencia de cáncer y las muertes relacionadas con la enfermedad cardiovascular.
Actualmente, los investigadores creen que la conexión está relacionada con niveles más elevados de inflamación y niveles más altos de insulina y otras hormonas que regulan los niveles de almacenamiento de grasa y de azúcar en la sangre.
El cáncer de colon, un tipo de cáncer colorrectal, es el cáncer que ataca bien el colon y/o el recto.
Generalmente, el cáncer colorrectal comienza como un pólipo no canceroso que se pueden encontrar durante una colonoscopia, una revisión de rutina para las personas a partir de los 50 años de edad.
Si una familia tiene historial de cáncer de colon, los exámenes deberían comenzar tan temprano como a los 40 años de edad.
Los pólipos encontrados durante las pruebas se pueden quitar y evaluar para determinar si son cancerosos o no.
Esta es una buena noticia para cualquier persona que tenga pólipos, ya que puede ser una señal para cambiar los hábitos de estilo de vida para reducir el riesgo de cáncer en el futuro.
¿Cómo reducir el riesgo de cáncer de colon?
Reducir el exceso de peso y el objetivo para un IMC normal para su altura.
Esto se puede lograr a través de una dieta saludable, actividad moderada y manejo del estrés.
Si tienes problemas para crear o mantener un plan para ayudarte a perder, busca ayuda!
Trabajar ya sea con un médico, un naturista o un experto en nutrición, así como un entrenador profesional, puede hacer la diferencia!
Las personas que tienen apoyo externo pierden más peso y por lo general no lo recuperan, en contrapartida de las personas que tratan de perder por su propia cuenta.
La entrada La obesidad aumenta el riesgo de cáncer de colon aparece primero en Mi salud diaria.