Y es que no es coincidencia que muchas mujeres, ya sean adolescentes o más mayores, hayan experimentado está desagradable sensación. Ninguna de nosotras estamos exentas a esta condición física, de hecho, es más normal y habitual de lo que se piensa. Las causas pueden ser muchas y no solo están delimitadas al ámbito sexual. Puede ser algo tan normal como usar ropa interior que no es la adecuada o, por ejemplo, llevar un pantalón ajustado.
Las señales más fáciles de reconocer son la secreciones espesas y blancas, picor, ardor o irritación en la vagina, inflamación de la vulva, dolor o escozor al orinar o mantener relaciones sexuales, por destacar las más usuales. Si tienes planeado ir a la playa y puedes encontrarte dentro de esta desfavorable situación, ¡No te alarmes! Existen consejos que puedes llevar a la práctica sin mucho esfuerzo y verás cómo resultan maravillosamente tus vacaciones.
Se sabe que el incremento de calor y humedad en la playa propicia un aumento en las infecciones vaginales por hongos. Para evitar esto es necesario limpiarse siempre de adelante hacia atrás, en el caso de las mujeres, debido a que es un elemento básico esencial para no contaminarse de materia fecal, la cual está repleta de hongos. Así mismo, bañarse con cuidado y retirar todo rastro de arena, secarse bien las zonas íntimas y no utilizar jabón perfumado alrededor del área genital, aseguraran una muy buena protección.
Otra recomendación es usar ropa interior hecha de algodón, ésta permite la circulación del aire; por el contrario, evita usar ropa ajustada o sintética. Durante el periodo menstrual es recomendable cambiar los tampones de manera continua y, si es posible, usar toallas sanitarias o compresas en lugar de los primeros, estos por estar compuestos de algodón en su mayoría. Si vas a usar continuamente traje de baño, asegúrate de cambiarlo inmediatamente después de usado, recuerda que los hongos se crean en la humedad. Al estar en contacto directo con arena, procura siempre sentarte sobre una toalla para mantenerte limpia y evite algún tipo de irritación que derive en alguna infección. Además, mantener bajos los niveles de estrés ayudarán a tu cuerpo a que proceses más rápido el tratamiento que te proporcione el médico.
Las infecciones por hongos son siempre molestas e incómodas, sin embargo, siguiendo estos consejos podrás observar cierta mejoría para combatir la infección. Para evitarlas sigue las observaciones que te haga tu médico y trata de mantener una cultura de prevención. Te invito a que le eches el ojo a esta infografía que podrá resultar de mucha utilidad cuando salgas a la playa.
Así que ya lo sabes, si vas a la playa, olvídate de las posibles molestias siguiendo estos consejos que escribí para ti. Una cultura de prevención médica puede resultarnos favorecedora al momento de tratar con hongos vaginales.