Los ejemplos más comunes son:
• Gyne-Lotrimin o Mycelex (clotrimazol)
• Gynezol o Femstat (butoconazole)
• Monistat (nitrato de miconazol)
• Vagistat-1 (tioconazol)
Asegúrate de leer todas las instrucciones del envase antes de usar cualquier crema vaginal para tratar una infección por hongos.
Algunas cremas vaginales deben utilizarse sólo a la hora de acostarse, ya que pueden ser un poco incómodas y salirse de la vagina durante el día. Algunas de estas cremas pueden venir con una crema vaginal tópica, diseñada para ser aplicada a la abertura de la vagina y el tejido circundante (llamado “vulva”) y se usa externamente, en lugar de insertarse en la vagina. La crema tópica puede ayudar a aliviar la comezón, mientras que la crema antimicótica trata la infección por hongos.
Si usas una crema vaginal para tratar una infección por hongos, debes abstenerte de tener relaciones sexuales con condones o un diafragma para el control de la natalidad. Estas cremas a base de aceite pueden dañar el látex de los preservativos o diafragmas.
Cremas de venta libre
Puedes tratar la mayoría de las infecciones vaginales por hongos con una crema o supositorio vaginal de venta libre, los cuales puedes comprar en la mayoría de las grandes farmacias y supermercados. Algunas dosis de tratamiento vienen en ciclos de un día, tres días o siete días. Muchas de las cremas vaginales de venta libre y otros productos disponibles, a menudo contienen los mismos ingredientes para combatir una infección por hongos que el medicamento prescrito por el médico, aunque en dosis menos concentradas.