Una noticia sonada y comentada en los últimos días en todos los medios de comunicación ha sido la eliminación por parte de la Univerisad de Barcelona de su máster en medicina homeopática, una formación destinada a médicos y que ha sido eliminada porque no está basada en ninguna evidencia científica; es decir, durante todos estos años se ha impartido un máster universitario en una terapia que nadie se había interesado en comprobar si funcionaba, y, puesto que los estudios indican que no es mejor que el efecto placebo, por fin ha sido descartada de la Universidad de Barcelona.
Países como Australia la vetaron por el mismo motivo: carecer de evidencia científica, y siguen apareciendo estudios y revisiones que indican que no es superior al placebo, como el caso de esta revisión de 57 revisiones sistemáticas, incluyendo un total de 176 estudios individuales donde lo que se encontró nuevamente es que la homeopatía no es superior al placebo.
La homeopatía no es mejor que el placebo
Si un tratamiento no supera al efecto placebo, no es considerado como una herramienta terapéutica. No puede (o al menos, no debe) ser comercializado como tratamiento, pues, en muchos casos, no es mejor que tomar píldoras vacías, o simplemente dejar que el tiempo pase y tal vez se produzca remisión espontánea de los síntomas. Mucha más información sobre el poder del efecto placebo, y cómo genera respuestas en nuestro organismo, en la completa ponencia de la investigadora especializada en efecto placebo, Elisa Carlino (vídeo en youtube).
Por este motivo, los profesionales sanitarios debemos (o deberíamos, que para eso tenemos un código deontológico y una formación científica) emplear tratamientos que sean eficaces, beneficiosos para nuestros pacientes y estén basados en mecanismos de acción más allá del placebo.
Para los defensores de este tipo de terapias, lógicamente cada cual es libre de pensar, opinar, creer lo que quiera… Pero, en salud, no estamos hablando de creencias, sino de tratamientos, lo cual supone un riesgo real de que personas mueran por no recibir un tratamiento adecuado.
La salud exige un tratamiento que esté a la altura
Es un tema muy serio, que requiere actuaciones profesionales. Aplicar una terapia sin efectos demostrados o que simplemente no sea mejor que el placebo puede suponer un coste de oportunidad y un riesgo vital: pierdes un tratamiento válido (con sus pros y sus contras, pero con su base científica y eficacia medible) por utilizar un tratamiento alternativo sin fundamentos.
En España tenemos reciente el caso de un padre que ha perdido a su hijo, enfermo de cáncer, que abandonó el tratamiento médico para pasar a uno alternativo. Por desgracia, de estos casos hay muchos, repartidos por todo el mundo.
Para terminar, os invito a ver un par de vídeos. La intervención del médico Vicente Baos en una jornada sobre homeopatía, y el vídeo donde se explica cómo se pudieron inventar una terapia alternativa nacida de la nada, con el resultado de que parece que queremos creer lo que sea y como sea, sin hacer preguntas ni buscar fundamentos.
Imagen por IAKOBCHUK VIACHESLAV en Shutterstock (no reutilizar)
La entrada Homeopatía: perdiendo respaldo por NO tener evidencia ha sido publicada originalmente en Tufisio.net Blog de Fisioterapia.