Porque, aunque cuidemos nuestra alimentación, un poco de dulce no hace daño a nadie y, además, hay una gran variedad de dulces ligeros que podemos hacer en casa sin necesidad de abusar del azúcar ni las grasas.
En los inicios del blog ya vimos aquel Carrot Cake con solo una cucharada sopera de aceite, mucha zanahoria y hasta cobertura completamente natural y sin azúcares añadidos.
Pero qué hay de los postres? los dulces que te puedes tomar después de comer o cenar sin sentirte demasiado llena y darte su justa dosis de dulce?
Normalmente, sobretodo los de cuchara, solemos comprarlos en el supermercado, pero, aún siendo sin azúcares añadidos, son realmente ligeros?
Aquí ya vimos que no todos los productos sin azúcares añadidos tienen porque ser a la vez bajos en grasa, y que, además, muchos suelen abusar de productos químicos de dudosos beneficios para nuestro organismo.
También hablamos de que no siempre los productos light son lo que prometen y que, aunque efectivamente contienen menos calorías que su versión original, tampoco suelen ser ninguna panacea.
Así que, porqué no hacerlos en casa? la mayoría son rápidos y fáciles de hacer, sabemos lo que contienen y podemos adaptarlos a nuestro gusto y, si lo que nos da miedo es tener la tentación tan cerca, aquí ya vimos algunos recursos para que esto no torpedee nuestros hábitos alimenticios y, de pasada, nuestra silueta.
Y, para ayudaros a coger ideas y, siguiendo la línea de las natillas light que ya publiqué, hoy os traigo la receta de un flan light sin azúcares añadidos que en casa es ya un invitado habitual.
Cada ración contiene un huevo, así que la única precaución seria no tomar ninguno más a lo largo del día, lo siento pero la tortilla y el flan no hacen buena pareja, así que es mejor no juntarlos y dejarlos cada uno a su aire :P.
Flan light para endulzar el postre con pocas calorías
Necesitarás
- 5 huevos grandes a temperatura ambiente.
- 375 ml de leche desnatada.
- 15 ml de edulcorante líquido a base de estevia.
- una vaina de vainilla de tahití.Vamos allá?
Precalienta el horno a 160 ºC.
Corta la vaina de vainilla por la mitad y, con la ayuda de un cuchillo, rasca su interior.
Pon esas virutas de vainilla junto a la leche en un cazo a hervir.
Cuando rompa hervir, retíralo del fuego y espera a que se enfríe.
Mientras, bate los huevos con el edulcorante y añádeles, poco a poco y sin para de remover la leche.
Colócalo en 5 flaneras individuales o 1 de grande y hornéalo al baño María durante 45 minutos.
También puedes cocerlos en una cazuela al baño María sin necesidad de encender el horno, pero si optas por este último, tápalos con un poco de papel de aluminio para evitar que se resequen.
Una vez hechos, dejar enfriar por completo y conservar en el frigorífico hasta el momento de servir.
Espero que os haya gustado el post de hoy y que os animéis a preparar vuestros propios dulces. Feliz fin de semana y, como siempre, nos vemos el lunes!