¿Cuáles son las alteraciones propias de la tercera edad?
A medida que las personas envejecen, se van generando diferentes dolencias y enfermedades que pueden agravarse rápidamente si no se trabaja en su prevención y cuidado. Un listado de las dolencias más habituales que puede ayudarnos a prestar atención de cara a asistir al médico y posteriormente realizar ejercicios con un fisioterapeuta:Caídas o episodios de inestabilidad
Dificultad para deambular y lentitud
Úlceras por presión
Mareos
Dietas no variadas que afectan al organismo
Dolores que pueden causar náuseas o vértigos
Dificultades para hablar
Problemas de tipo intelectual (memoria, depresión, somnolencia)
Estos son algunos de los síntomas más habituales en pacientes de la tercera edad, pero pueden aparecer otros que al paciente o familiares le resultan relevantes. El mejor consejo es asistir el médico de inmediato, para poder detectar y discriminar la relevancia de forma veloz.
Prevención y tratamiento para la discapacidad en la tercera edad
Entendiendo la discapacidad como “un término general que abarca deficiencias, limitaciones de la actividad y restricciones de la participación, como sostiene la Organización Mundial de la Salud (OMS), las personas mayores muchas veces sufren de algún grado de discapacidad que puede ser adecuadamente controlado o tratado para que su calidad de vida siga siendo alta.La fisioterapia cumple un rol muy importante en todo lo que tiene que ver con prevención y tratamiento de patologías sin recurrir a la farmacología. De todas formas, es importante remarcar que la fisioterapia no reemplaza a los aportes de la farmacología, sino que complementan el tratamiento para seguir mejorando desde diferentes ángulos la salud y la calidad de vida de los adultos mayores. El trabajo multidisciplinar es la clave para genera mayores beneficios para que el adulto mayor tenga mejor calidad de vida a partir de la prevención de la discapacidad.
Fisioterapia respiratoria, fisioterapia neurológica y la fisioterapia basada en terapia manual son tres de las ramas más importantes en las que vemos profesionales trabajando con pacientes de la tercera edad. La utilización de estas distintas técnicas depende de la situación específica que atraviese cada adulto mayor. Por supuesto que hay beneficios y consideraciones a tener en cuenta para elegir una u otra disciplina, pero siempre entendiendo que la mejor herramienta para garantizar calidad de vida es un abordaje desde diferentes ángulos a una dolencia.
Los ejercicios y trabajos corporales que promueve la fisioterapia dependerán siempre de un análisis cuidadoso junto con el resto de los médicos y profesionales de la salud que trabajan con cada paciente. Buscando la propuesta que mejor se adapte a las necesidades, requerimientos y discapacidades que se buscan prevenir o tratar en cada historia clínica.