Xenical (Orlistat). Es una píldora de venta libre diseñada para la pérdida de peso. Su principio activo actúa inhibiendo la función de la enzima lipasa, encargada de descomponer la grasa para que el cuerpo pueda asimilarla. De esta manera, como la grasa no se descompone, pasa directamente a los intestinos y se elimina antes de que el organismo pueda absorberla. Su acción es muy eficaz para controlar el peso pero también provoca efectos secundarios muy molestos que perjudican el funcionamiento del sistema digestivo.
Alli. Fue el primer medicamento de venta libre que la FDA aprobó para perder peso. En esencia, es una versión reducida de la Xenical y su mecanismo es muy similar. Alli, impide la descomposición de las grasas y, por ende, la absorción de las mismas. Como resultado, las grasas se expulsan de forma cruda, por lo que a menudo pueden provocar efectos secundarios como diarreas, calambres, gases y manchas oleosas.
Adipex-P (Phentermine). Adipex es un fármaco que se puede encontrar solo bajo prescripción médica. Tiene un efecto muy potente ya que acelera el metabolismo y produce una pérdida rápida de peso. Por eso, se suele recomendar a las personas obesas que padecen una condición de salud delicada, como enfermedades del corazón, problemas vasculares o diabetes, y necesitan adelgazar para mejorar su salud. No obstante, entre sus efectos adversos se encuentran las alucinaciones, temblores, impotencia e hipertensión arterial.
Sanorex (Mazindol). Este medicamento es muy efectivo para perder peso. Actúa de dos maneras: reduciendo el apetito y aumentando la presión arterial, para hacer que el metabolismo trabaje más rápido. De hecho, es muy conocido por su poder anorexígeno ya que tiene una gran capacidad para suprimir prácticamente por completo el apetito. Al igual que el resto de los fármacos para adelgazar, Sanorex provoca efectos secundarios graves, que van desde temblores hasta alucinaciones o convulsiones, por lo que debe ser utilizado bajo supervisión médica.
Meridia (Sibutramina). Meridia es un fármaco que ayuda a perder peso interviniendo sobre las señales del cerebro. En práctica, sus principios activos actúan sobre el centro cerebral de la saciedad, mejorando el estado de ánimo y provocando una disminución del apetito. Como resultado, se consumen menos calorías sin necesidad de renunciar a ningún alimento y de esta forma, el exceso de peso va desapareciendo. Sin embargo, cuando se consume este fármaco durante demasiado tiempo, tiende a provocar efectos secundarios indeseables como temblores, mareos, insomnio y reacciones alérgicas, por lo que debe ser usado bajo estricta prescripción médica.
Fuente: Medicamentos recetados para bajar de peso - Nutrición Saludable