El estudio se ha centrado en investigar si comer pescado como un alimento entero tendría un tipo de efecto similar al de los complementos de ácidos grasos omega 3. Desde el Hospital Brigham and Womens, en Boston, Estados Unidos, donde ha tenido lugar esta investigación, apuntan a que la cantidad de ácidos grasos omega 3 en el pescado es más baja que las dosis administradas en los ensayos.
Se demostró que las personas que participaron en el estudio, cuánto más cantidad de pescado comían a la semana, la puntuación de actividad de su enfermedad se reducía. En el estudio participaron una gran mayoría de mujeres, porque son las que más sufren el dolor de la artritis. Se vio que la dieta afecta directamente a los resultados de la enfermedad.
La mayoría de los participantes del estudio tomaban medicamentos para reducir la inflamación, pero se dieron cuenta que la dieta intercede directamente. Para analizar la muestra del estudio, casi un 20% de los participantes comían pescado menos de una vez al mes, o nunca lo comían, mientras que cerca de un 18% consumían pescado más de dos veces por semana.
Y se dieron cuenta de que los que comían pescado con más frecuencia tuvieron menos dolor e inflamación, frente a los que comían pescado menos de una vez al mes. Si bien no hay resultados concluyentes, porque podría ser que los pacientes tuvieran ya una dieta sana, los beneficios del pescado son muchos, y se ha dado un paso adelante sobre el dolor de la artritis. Se recordó que si no pueden comer pescado, probar con pastillas de omega 3 es otra solución.
Otros estudios han puesto de manifiesto que el pescado va bien para proteger el corazón, disminuir el colesterol malo, retener la memoria, y puede proteger al cerebro de la contracción asociada con la enfermedad del Alzheimer.