Si no nos alimentamos correctamente, el nivel de estrés puede aumentar generando enfermedades físicas y también psíquicas. Veamos qué principales alimentos son buenos para luchar contra el malestar por la acumulación de trabajo.
Vitamina C
La vitamina C es buena para poder equilibrar el organismo en épocas de mucho nerviosismo. Esto se puede conseguir a través de la fruta, que lleva grandes cantidad de vitamina C, A y B. En este caso, podemos ingerir naranjas, mandarinas y kiwis, que además son frutas de temporada que nos resolverán también problemas con los resfriados. La vitamina C refuerza el sistema inmunitario, y también la encontramos en algunas hortalizas tales como la zanahoria, las patatas, las espinacas, etc.
Ácido fólico y hierro
Está claro que las épocas de estrés actúan en todo el organismo, debilitando nuestro estado de salud general. Ello se traduce en pérdidas de cabello, del apetito, en mayor cansancio general y pocas ganas de nada. Es por ello que debemos reforzarnos con la ingesta de alimentos ricos en ácido fólico, que se encuentra en muchas verduras, como las judías. El hierro lo podemos obtener en las lentejas o la carne de vacuno roja, entre otros.
Pescado azul
Diversos estudios establecen que el pescado azul es favorable para combatir el estrés. Para sobrellevarlo necesitamos proteínas, y muchas de ellas se encuentran en el pescado azul, como el salmón, la trucha, el atún y las sardinas.
Frutos secos
A todo ello le podemos añadir frutos secos. Las nueces son unas de los más recomendables, al tener mayor contenido de vitamina tipo B1. También son buenas las almendras que cuentan con calcio y magnesio.
Verduras
Ya lo hemos visto anteriormente al nombrar las vitaminas y el ácido fólico. En épocas de mayor flujo de trabajo, no podemos olvidarnos de las verduras. Especialmente las de color verde, como son las espinacas, la lechuga y la alcachofa, por su alto contenido en minerales. La calabaza es también altamente recomendable.
Agua
En cuanto a bebidas, se recomienda beber sobre todo agua, aunque un vaso de vino o de cerveza por semana también es saludable. Frente al estrés, el alcohol puede producir un efecto negativo, aumentando los niveles de nerviosismo.