La próxima vez que te sientas adolorido puedes probar alguno de estos analgésicos que nos regala la naturaleza. Antes de salir corriendo a la farmacia, echa un vistazo en tu cocina y verifica si ya posees algún remedio para el dolor. Recuerda que los síntomas molestos que persisten y no mejoran al cabo de un tiempo pueden indicar algo más grave que requiere intervención médica.
Analgésicos naturales comunes
El vinagre de manzana ayuda a aliviar la artritis, el dolor muscular y mejora la movilidad articular. Toma 2 cucharaditas de vinagre de manzana disueltas en un vaso de agua antes de cada comida. (Ver: Dolor muscular generalizado ¿Qué me está pasando?)
El jengibre puede ayudar a calmar la indigestión y a expulsar gases. Sus fuertes propiedades anti-inflamatorias son excelentes para tratar el dolor muscular y artrítico. Para obtener buenos resultados, agrega 1 o 2 cucharaditas de jengibre molido a las comidas.
Usa el ajo para tratar un dolor de oído. Sólo 2 gotas de aceite de ajo caliente aplicadas dos veces al día en tu oído aliviarán el dolor sin necesidad de utilizar medicamentos. (Ver: 24 remedios caseros para tratar un dolor de oído)
El clavo de olor puede calmar inmediatamente un dolor de muelas. Masticar un clavo de olor aliviará el dolor por hasta dos horas, gracias a uno de sus compuestos, el eugenol. Este es un poderoso anestésico natural.
Algunos estudios han demostrado que la cúrcuma es más eficaz para aliviar el dolor, que la aspirina y otros medicamentos similares. Es excelente para aliviar del dolor artrítico crónico y la fibromialgia. Espolvorea ¼ cucharadita de cúrcuma al día en cualquier plato como arroz, verduras o carne.
Beber té de menta puede aliviar el dolor de garganta, reducir el malestar estomacal y el dolor abdominal causado por estrés. Esto se debe a que el mentol inhibe los nervios que reaccionan a los estímulos dolorosos.
El vinagre blanco neutraliza el veneno y alivia el dolor causado por una picadura de abejas, avispas o medusas. Solo hay que aplicarlo directamente sobre el área afectada.
Investigaciones recientes han demostrado que las semillas de linaza molida alivian el dolor y la sensibilidad en los senos asociada al inicio del ciclo menstrual. Esto se debe a una serie de compuestos naturales presentes en la linaza que previenen los picos de estrógeno. El polvo de linaza se puede añadir a las comidas, o aplicar aceite de linaza directamente sobre los senos.
El jugo de tomate ayuda a aliviar los calambres en las piernas. Los calambres en las piernas generalmente son causados por una deficiencia de potasio, probablemente debido a la transpiración fuerte durante el ejercicio o a través de la orina. El jugo de tomate es rico en potasio, por lo tanto, reducirá el riesgo de padecer estos dolorosos calambres en las piernas.
La miel cruda alivia el dolor de garganta y las llagas en la boca. Las enzimas naturales de la miel eliminan la inflamación, ayudan a destruir los virus y aceleran el proceso de curación. El uso de canela y miel es muy popular en la medicina ayurvédica y la medicina alternativa. Prepara una pasta con canela y miel y aplícala en la zona dolorosa de la piel, realizando un masaje para obtener alivio. Beber agua tibia con miel y canela de forma regular también se utiliza para calmar los síntomas de la artritis.
Para algunas personas el café ayuda a aliviar el dolor de migraña más rápidamente. La cafeína es una espada de doble filo, ya que cuando se bebe mucho café puede desencadenar brotes de migraña, pero en pequeñas dosis ayuda a reducir el dolor. Los expertos afirman que la cafeína estimula al revestimiento del estómago para absorber los analgésicos de forma más rápida y eficaz.
Los taninos en el té ayudan a detener las contracciones en los intestinos que se producen durante un ataque de diarrea o colitis. Bebe mucho té cuando tienes diarrea para aliviar el dolor.
Cuando tienes el pecho congestionado y adolorido como resultado de un resfriado, puedes frotar una cantidad generosa de mostaza en tu pecho y cubrirlo con un paño caliente. Esto aliviará el dolor y la congestión, gracias a las propiedades anti-inflamatorias de algunos compuestos activos en la mostaza.
El bicarbonato de sodio es excelente para aliviar el dolor de una quemadura. Prepara una pasta mezclando bicarbonato con agua, aplícala sobre la zona afectada y cúbrela con una gasa húmeda durante unos minutos. La naturaleza alcalina del bicarbonato de sodio neutralizará el ácido en la herida previniendo una infección y reduciendo el dolor.
El yogur es un analgésico excelente cuando se aplica en el área rectal para calmar las hemorroides ardientes. Los cultivos presentes en el yogurt también matan las bacterias que causan picor rectal.
Realiza gárgaras con agua salada para aliviar el dolor de garganta. La sal es un desinfectante natural que también ayuda a curar cortes y heridas.
La pimienta de cayena ayuda a aliviar el dolor de garganta y el dolor de migraña. El principal compuesto activo de la cayena, la capsaicina, tiene propiedades que permiten aliviar el dolor al obstaculizar la transmisión de un neurotransmisor responsable de transmitir señales de dolor al cerebro. Existen además algunos tés curativos para el dolor de garganta que contienen cayena. Agrega de 1 a 3 cucharaditas de pimienta de cayena en un vaso de agua para aliviar el malestar de forma instantánea.