¿Alguna vez haz sentido que al reírte, estornudar o toser se te sale una pequeña cantidad de orina? Esto se debe a que los músculos del suelo pélvico se han ido debilitando por diferentes factores; un embarazo, el parto o la edad, y los ejercicios de Kegel consisten en contraer estos músculos de manera que progresivamente se fortalezcan.
Los beneficios de este ejercicio son inmensos, ayudan a mejorar el placer sexual y te favorece para llegar al orgasmo. Estos ejercicios o estiramientos son muy parecidos o casi iguales a los del yoga.
Si quieres saber más sobre como puedes hacer estos ejercicios aquí te dejo algunos ejercicios básicos con los que puedes ir practicando gradualmente.
1.- Relajada
Busca un tapete de yoga o ve a tu cama, donde te sientas más cómoda. Para comenzar con estos ejercicios recuéstate boca arriba, inhala y exhala unas 4 o 5 veces hasta que estes completamente relajada. Repite 3 veces.
2.- Estirada boca arriba
Recuéstate boca abajo con los brazos estirados, comienza a contraer el suelo pélvico como si estuvieras aguantándote las ganas de orinar primero 2 segundos y luego 3 segundos, después exhala y relaja los músculos. Entre una contracción y otra te vuelves a relajar. Repite esto 10 veces. 
3-. Cadera arriba abajo
Regresa a la posición inicial y con las piernas flexionadas, inhala, levanta los glúteos y un poco la espalda, formando un ángulo de 45º grados. En esta posición contrae los músculos 5 segundos y y regresas relajando y exhalando. Repite esto 10 veces. 
4.- Espalda ascendente y descendente
Pon tus rodillas y manos sobre el tapete sube tu espalda como si te estuvieras encorbando y de la misma forma contrae el suelo pélvico 5 segundos y baja formando un ángulo de 90º grados con tu espalda y piernas. Repite 10 veces.
5.- Sentadilla
Por último una sentadilla que al bajar y formar un ángulo de 90 grados contraes 4 segundos y regresas a una posición normal y relajas. Repite 10 veces.
Espero que te hayan servido estos ejercicios y que los pongas en práctica, recuerda que son útiles para hombres y mujeres. Los puedes hacer 3 veces al día, pero antes consulta a un fisioterapeuta si eres apto para hacer este tipo de actividad.
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