Tras todos estos excesos, cuando nos damos cuenta, nos miramos en el espejo y vemos que hemos aumentado un poco nuestro volumen, quizá hayamos subido un poco de peso, la ropa nos quedará más ajustada y es entonces cuando comenzamos a lamentarnos y nos planteamos someternos a dietas milagrosas o nos obcecamos en ir al gimnasio a entrenar en un solo día lo que no hemos hecho durante todas las semanas navideñas. Estas no son buenas opciones.
Dejarnos llevar por dietas que prometen pérdidas de peso milagrosas o pegarnos tres horas en el gimnasio después de abandonarlo durante todas las fiestas no es la solución, podemos llegar a crearnos problemas de salud (dolores fuertes de agujetas, lesiones en las articulaciones, agotamiento, etc.) y que puede reultar totalmente contraproducente.
Lo recomendable es plantearnos pedir ayuda, buscar un profesional del ejercicio físico que nos guíe y nos motive para retomar nuestra vida saludable y sin que nos resulte tan pesado y agotador, es ahí donde debemos pensar en un entrenador personal.
Beneficios que ofrece un entrenador personal para empezar bien el año
Supervisión:
El entrenador personal motiva y alenta a la persona para que se sienta capaz de seguir adelante, logrando cumplir el plan de entrenamiento, esto hará que sin duda logre tus metas. Además, tendrá en cuenta su condición física actual para programar los ejercicios adecuados y en la intensidad adecuada, para empezar poco a poco y con buena letra.
Te apoyará y supervisará durante toda tu sesión de entrenamiento, cuidando que emplees la intensidad adecuada en cada ejercicio, basándose en tu condición físico actual y en tus características particulares, de esta forma, será un entrenamiento totalmente a medida que podrás llevar a cabo, por eso, cuando lo finalices, las sensaciones serán muy positivas.
Pensar en un entrenador personal para empezar bien el año es lo que debemos hacer, hará nuestro camino más fácil y pronto volveremos a un estado de forma saludable y adecuado.
Cuidado:
El entrenador personal te indicará cómo debes hacer los ejercicios evitando sobre esfuerzos, vigilará tu técnica y te enseñará a cómo moverte adecuadamente, cómo manejar tu cuerpo para que puedas controlar todos tus movimientos, estará contigo supervisando cada ejercicio, de esta forma reducirás al mínimo el riesgo de lesión, tu cuerpo te agradecerá empezar progresivamente, no sentirás dolores y disfrutarás del camino hacia un adecuado estado de forma.
Un entrenador personal cualificado no te mandará ejercicios imposibles ni movimientos que parecen dignos de un acróbata, programará ejercicios adecuados para ti, que te aporten lo que necesitas, que puedas llegar a hacerlos a la perfección y que no supongan retos inalcanzables.
Desconfía de aquellos entrenadores personales que para impresionar te planifican ejercicios sacados del mismo circo del sol, opta por profesionales cualificados que no se dediquen a asombrar con ejercicios vistosos y complicados, un buen entrenador personal es el que sabe elegir los ejercicios adecuados para cada persona, sin tonterías.
Motivación:
Es habitual que al principio te puedas sentir un poco desanimado ya que los resultados no serán instantáneos, pero con la ayuda de tu entrenador personal, que además te dará pautas para seguir una alimentación sana, y tu compromiso de entrenar las veces que hagan falta y portarte con la alimentación, poco a poco empezarás a sentir los resultados y a verlos.
Además, un buen entrenador personal, buscará siempre que estés motivado, se fijará en qué ejercicios son los que más te gustan y los utilizará como motivación, así, el entrenamiento no se hará duro sino que incluso habrá ejercicios con los que te disfrutarás como un niño jugando. Se trata de lograr que el entrenamiento sea algo agradable y que te produzca sensaciones positivas, no en generar rechazo, por ello, las sesiones de entrenamiento se planificarán con una intensidad progresiva que puedas cumplir y paso a paso llegar a tus metas.
Salud:
Si padeces alguna patología, la mejor opción es un entrenador personal especializado, estará capacitado para llevar situaciones de personas que padecen ciertas patologías como artritis, osteoporosis, enfermedades cardiovasculares, etc.
Es importante que si padeces alguna de ellas, consultes el currículum del profesional del ejercicio, ya que no todos tienen los conocimientos necesarios para lidiar con estas patologías, debes buscar un profesional especializado y con la formación adecuada para programar ejercicios que no agraven tales patologías y que vayan encaminados a mejorarlas, piensa que está en juego tu salud.
Contar con un entrenador personal para empezar bien el año te ayudara significativamente a mejorar por dentro y por fuera, tendrás más energía, más vitalidad y además, irá acompañado de una mejor apariencia física y sobre todo, más salud, es una inversión sin pérdidas, un regalo que le darás a tu cuerpo, mente y espíritu.