Pero la verdad es que -a pesar de lo que Internet pueda hacerte creer- la mayoría de las personas no viven vidas perfectamente cuidadas y despreocupadas, cargadas de rituales de autocuidado. Si el autocuidado se siente más como una fantasía, es probable que sea porque la vida siempre tiene algunas variables menos deseables.
Estaciones como éstas forman parte de la vida. Está bien sentir todo su peso, y puede ser útil saber que también pasarán. Por mucho que intentemos mantener el orden, a veces nos vemos arrastrados por el caos de la vida.
Cómo sacar tiempo para el autocuidado cuando tu vida es un desastre
Si no estás en tu mejor momento, espero que estos consejos sobre cómo sacar tiempo para el autocuidado cuando tu vida es un desastre te ayuden a enfriar la temperatura unos cuantos grados.Acepta el desorden
Es más fácil decirlo que hacerlo, pero a veces nuestra resistencia al caos es parte del problema. La vida no se supone que sea perfecta, y desde luego no es culpa tuya cuando no lo es. Permitirse aceptar que las cosas pueden estar un poco desordenadas durante un tiempo es un acto de autocuidado en sí mismo.Cuando le doy permiso a mi vida para que sea difícil, mi sistema nervioso se calma porque ya no estoy tratando de activar el modo de lucha o huida. Cuando permito que los desafíos aparezcan en mi vida, estoy más preparado para manejarlos. Por cierto, dar permiso a la vida para que sea dura no es lo mismo que esperar lo peor, ya que eso es una receta para la ansiedad. El matiz aquí es la aceptación frente a la anticipación. Se permite que las cosas se sientan desafiantes, pero eso no significa que siempre lo sean.
Date la gracia
Vale, has abandonado todas las rutinas de autocuidado que conocías. O tal vez nunca has sido capaz de mantener los hábitos saludables que anhelabas. En primer lugar, bienvenido al club. No estás sola. Puede que no lo parezca porque la gente no suele llevar su agotamiento bajo la manga, pero te aseguro que estás en muy buena compañía.En segundo lugar, debes saber que no estás fracasando en el autocuidado. Estás sobreviviendo. Eso es una hazaña en sí misma. Cuando empiezo a sentir que las palabras fracaso se forman en mis labios, respiro profundamente y me recuerdo a mí misma que soy una sola persona con una cantidad finita de recursos.
Reencuadra el tiempo como una mercancía de la que eres dueño
Una mercancía es algo que puedes poseer, intercambiar, comprar y vender. Quiero que lo entiendas. La razón por la que las cosas parecen más difíciles a veces y más fáciles otras veces casi siempre se reduce al tiempo.Una vida equilibrada consiste en tener tiempo para hacer lo que necesitas y lo que te gusta. Cuando el tiempo es limitado, tendemos a dejar de lado lo que nos gusta en aras de lo que es necesario. Pero cuando reconocemos que nuestro tiempo es nuestro -y que tenemos la capacidad de decidir cómo usarlo- eso nos permite incorporar un poco más de autocuidado en la mezcla.
Priorizar el desorden
Ahora que sabe cuántas horas tienes al día, considera la posibilidad de priorizar los incendios que debes apagar. Puede que algunos de ellos no estén ardiendo tanto como crees.Esto es importante porque si no lo haces, todos los problemas menores que te caigan del cielo van a tener prioridad sobre tu salud mental. Si vas a sacar tiempo para el autocuidado, tienes que enviar algunos de tus incendios al futuro.
Elige tu forma más potente de autocuidado
Cuando tienes poco tiempo, obviamente no puedes dedicar un día entero a todos los rituales de autocuidado que te gustan. Así que es el momento de tener en cuenta las prácticas que más impacto tienen en el menor tiempo posible. Esto será diferente para cada persona.No importa lo que elijas, siempre que elijas algo. Si no estás seguro de qué prácticas dan resultados, prueba unas cuantas. Pasa por algunas de tus favoritas y fíjate en si te convencen o no.
Bloquea tiempo en tu calendario para el autocuidado
Seguro que lo veías venir, pero es un tópico por una razón, amigas. Si no está en una lista de tareas, probablemente no se hará. Si prefieres añadir tu práctica de autocuidado a tu lista de tareas, tampoco es mala idea. Pero si utilizas un calendario con regularidad, ver el tiempo bloqueado para ti te recordará lo importante que es y te asegurará que lo hagas. Y si tienes un calendario compartido, puede recordar a los demás que este es un tiempo no negociable para ti.Cuando hagas autocuidado, siéntelo
Cuando la vida se desarrolla en modo de ajetreo, es muy fácil apresurarse a lo largo del día en modo de supervivencia. Es posible que estés marcando casillas de la lista tan rápido como puedas para poder llegar al siguiente problema que hay que resolver.En cuanto te dediques a cualquier forma de autocuidado que hayas elegido, tómate un momento para hacer una pausa. Respira. Nota cómo se siente. Por ejemplo, si todo el tiempo que tienes para incorporar es una ducha, no lo pases pensando en lo que tienes que hacer después. En su lugar, nota cómo se siente el agua en tu espalda. Te estás concediendo este tiempo, así que estate presente en él. Empápate de él y deléitate con él.