Los usos del aceite de Argán son varios: cosmético, culinario y medicinal.
El aceite de argán ha sido durante siglos el componente básico de la dieta de las tribus bereberes, aparte de que es uno de los elementos más importantes en la medicina tradicional.
Normalmente han sido las mujeres bereberes las que lo han elaborado, y es interesante la historia de cómo se han ido reuniendo en cooperativas, transformando la vida de estas mujeres y la comunidad.
El árbol de Argán o Argania Espinosa puede vivir más de 200 años y resistir temperaturas entre 3 y más de 50 grados, y está bajo la protección de la UNESCO porque disminuyó mucho su número y por diferentes problemas ecológicos.
El aceite de color ámbar se originó en la costa Haha de Marruecos desde al menos 600 a. C., los fenicios se basaron en el aceite para la curación y la belleza.
El siguiente vídeo es muy ilustrador de cómo ha ayudado a las mujeres que lo trabajan y estudios que se están haciendo que demuestran propiedades curativas:
Sin embargo en el siguiente documental, en dos partes, se puede ver que no todo lo que reluce es oro, que efectivamente el aceite de Argán tiene muchas propiedades, pero la mayoría del aceite de Argán que se vende como puro no es tal, y gran parte de la cosmética que publicita contener aceite de Argán es puro marketing.
En el artículo “El aceite de argán Oro líquido” se indica lo siguiente:
El aceite de argán tiene denominación de origen para proteger al consumidor. Desde el 2009 existe AMIGHA, que es el nombre de la Asociación de Productores del Argán. Esta asociación es la que garantiza que las condiciones de producción se mantengan constantes para vigilar que su calidad esté intacta. De esa manera se mantiene la confianza de los consumidores.
Y en el artículo “Aceite de Argán – Propiedades y opinión sobre cosméticos” se ofrece la fórmula de comprobar los ingredientes para saber si es puro, además de un interesante vídeo sobre sus múltiples usos cosméticos:
Otra forma de ver si es 100% puro nuestro aceite, busca en la etiqueta del producto que en la lista ingredientes únicamente aparezca Argania spinosa y algún conservante como la vitamina E (Tocopherol). Recuerda, debe ser en la lista de ingredientes, ya que es ésta la que especifica qué contienen los cosméticos. Si no aparece en ninguna parte del envase, deberías acudir a alguna oficina para el consumidor, ya que lo más probable es que el aceite de argán no sea puro.
Resumiendo propiedades del auténtico aceite de Argán puro:
Para la piel:
Es muy nutritivo y regenerante.
Tiene un gran poder hidratante y antioxidante, neutraliza los efectos del envejecimiento de la piel.
Es reafirmante y suavizante, restaura la elasticidad y flexibilidad a la piel.
Reequilibra el pH de la piel
Es desinflamatorio y controla el exceso de grasa
Tiene efectos antisépticos y es fungicida.
Para el cabello:
Hidrata y da brillo.
Cierra y evita puntas partidas
Combate la caspa
Previene la resequedad del cuero cabelludo
Uso culinario y medicinal:
Muy valorado en la alta cocina por ser un aceite muy ligero, digestivo y con un delicioso sabor a nueces
Su ácido oleico ayuda en los casos de altos niveles de colesterol.
Los ácidos grasos que contiene producen prostaglandinas, que ayudan en la inmunización y las funciones antiinflamatorias.
Ayuda en problemas cardio-vasculares.
Es beneficioso para la artritis y la enfermedad reumática.
Tiene propiedades anticancerígenas (en estudio)
Pues a disfrutar de este extraordinario aceite, pero que sea Aceite de Argán puro.
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