¡Muy buenas gastrolovers!
Ya tocaba alguna recetita con avena, ¿no?
La avena es un cereal especialmente interesante ya que tiene numerosas propiedades, entre ellas, la de bajar el colesterol HDL (colesterol malo), reducir la hipertensión y estabilizar el azúcar en sangre. Además nos ayuda a concentrarnos y relajarnos.
¡Ah! y casi se me olvida: ¡nos ofrece tantas posibilidades culinarias! Además de los típicos desayunos de porridge o overnight oats, también podemos utilizar la avena para hacer hamburguesas, todo tipo de bizcochos, bases de tartas, magdalenas, mugcakes, pancakes o tortitas,…
La que tengo en mi cocina es integral y ecológica. La diferencia con la avena que solemos encontrar en los supermercados, es que la integral es algo más oscura y dura, por lo que tarda algo más en cocerse, pero está mucho más rica y tiene muchos más nutrientes.
Bueno, me dejo ya de rollos y os invito a preparar los siguientes ingredientes al son de “Let´s talk” del grupo Death in the afternoon, que podréis encontrar al final de nuestra lista de reproducción “Healthy Garnnacha” en Spotify”. Ya veréis el toque veraniego más molón que tiene el tema.
PARA EL “PUDDING” DE AVENA:
– 6 CS de avena
– 1 vaso de leche de avena
– 1/2 vaso de avellanas sin sal
– 3 dátiles remojados
– 1 CS de harina de algarroba
– 1 CP rasa de maca (opcional, pero recomendado)
– Una pizca de vainilla
PARA LA MERMELADA DE FRAMBUESAS:
– 2 manojos de feambuesas (las que tengo son congeladas)
– 3 CS de lino molido (lo muelo en la batidora)
– Una pizca de ralladura de limón
– Una pizca de sal
– Una pizca de vainilla
– Unas gotas de limón
– Edulcorante al gusto
1) Trituramos bien las avellanas en la batidora y añadimos el resto de os ingredientes excepto la avena.
2) Mezclamos en un vaso el batido con la avena. Removemos bien y reservamos en el frigorífico bien tapado. Cuando haya pasado 1/2 hora volvemos a remover y esperamos a la mañana siguiente.
Por la mañana trituramos las frambuesas con el resto de ingredientes y las vertemos encima de la avena, que en estos momentos ya será un pudding. Si queréis, podéis darle un golpe de calor a la mermelada, de esta forma habrá un contraste frío- calor muy interesante.
Espero que os haya gustado este desayuno…y recoradad…
Las recetas están para cambiarlas
¡Un abrazo enorme gastrolovers!
Fuente: este post proviene de La mesa de Garnacha, donde puedes consultar el contenido original.
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