AGENDA
Las agendas son libretas con una estructura preestablecida, con calendarios anuales y mensuales y diarios. Pueden tener vista de semana completa o un día por página. Normalmente incluyen unas cuantas hojas para notas, y algún extra, como hojas de gastos, guía telefónica... Cada vez hay más opciones en el mercado que se adaptan a las necesidades de diferentes colectivos. Algunas incluyen tips de organización, frases inspiradoras o espacios para hacer una planificación más exhaustiva.
Ventajas:
1. Están listas para utilizar: solo tienes que abrir por el mes o la semana en cuestión y empezar a anotar tus tareas y citas. Cuando la falta de tiempo es una constante, la agenda es tu mejor aliada.
2. El tamaño: hoy día puedes encontrar agendas casi de cualquier tamaño, desde la clásica en a5 hasta grandes tamaño folio, pasando por supuesto, por tamaños mini de bolsillo. De esta forma se adaptan a tus necesidades, sean cuales sean.
3. Variedad de diseños: en el mercado puedes encontrar una cantidad enorme de agendas preciosas, lisas, de flores, con ilustraciones, frases motivadoras... Una buena forma de motivarte a la hora de planificar tu tiempo.
Desventajas:
1. No se adapta a ti: eres tú la que se tiene que adaptar a los apartados que contiene. Quizá incluye una hoja de gastos cada mes que no utilizas y echas en falta una página para marcarte objetivos, por ejemplo.
BULLET JOURNAL
El bullet Journal es una libreta en blanco donde puedes organizar tu tiempo a tu manera. Normalmente lleva un índice al inicio que creas tu misma con las listas y símbolos que te servirán para distinguir citas, tareas...
Ventajas:
1. Se adapta a tus necesidades: al ser tú misma la que elabora la agenda, puedes adaptarla a tus necesidades, incluir los apartados que consideres, saltarte un mes... ¡lo que quieras!
2. Te organizas mejor: cuando creas un sistema a la medida de tus necesidades concretas de cada momento, resulta mucho más eficaz. Puedes crear listas (de libros, de regalos, de bloques de tareas...), puedes crear fichas de cumplimiento de objetivos (vasos de agua que bebes al día, días que vas al gimnasio...)
3. Sirve de terapia: para muchas, el bullet es mucho más que una herramienta de organización. Es una forma de dedicarse unos minutos al día, decorando cada página con ilustraciones, recortes, washitape, sellos...
Desventajas:
1. Requiere tiempo y constancia: la ventaja de utilizarlo como terapia para desconectar, puede convertirse en desventaja en las épocas de más estrés. Tener que apuntar alguna cita o tarea y darte cuenta de que tienes que elaborar todo el mes puede llegar a ser un poco angustioso.
2. Puede distraerte: decorar tu bullet puede distraerte de su verdadera función, planificar tu tiempo. Corres el riesgo de estar invirtiendo más tiempo en crear un bullet bonito que un bullet práctico.
Como ves, cada sistema tiene sus ventajas y desventajas. La cuestión aquí es cuál de las dos se ajusta mejor a tus necesidades. Aquí van algunas preguntas que pueden ayudarte a resolver todas tus dudas al respecto:
1. ¿para qué necesitas la agenda?
2. ¿qué debe tener para que sea perfecta?
3. ¿de cuánto tiempo dispones a la semana para planificarte?
4. ¿te gusta dibujar y, en general, el mundo del scrap?
5. ¿Eres constante con las cosas que empiezas? ¿las dejas a medias o sueles llevarlas a término?
MI EXPERIENCIA
Yo tuve las mismas dudas que tú. Durante años he sido fiel a la agenda clásica, pero hace unos años me empezó a atraer la idea de crear una agenda que se adaptara al 100% a mis necesidades. Desde que emprendo, la organización de mi tiempo se ha convertido en mucho más que anotar unas pocas tareas al día. Es todo un ejercicio de gestión para sacar la máxima productividad a mi tiempo. Por ello, este año me animé a crear mi bullet journal y este ha sido el resultado.
1. 100% adaptada: yo hago varias planificaciones al año y, quizá la que más práctica me resulta es la trimestral. Sin embargo, aún no he encontrado ninguna agenda que tenga esta opción. Por eso, mi bullet incluye un apartado para marcar objetivos y definir acciones trimestrales que después desarrollo en la planificación mensual.
2. Tiempo para mi: crear el bullet me ha regalado un tiempo muy valioso para mi, para pensar en mis prioridades o simplemente desconectar del estrés diario. Como ves, mis diseños son sencillos, sin grandes florituras, pero el mero hecho de hacer las líneas del calendario, anotar cada día del mes, establecer las fechas señaladas... me ha servido como terapia en muchos momentos.
3. Espacio para todo: desde un panel de inspiración hasta la evaluación de resultados. Todo lo que he ido necesitando en mi día a día, lo tengo recogido en una única herramienta: el bullet. Gracias a esto, he tenido a mano todo lo que necesito. En cualquier momento y en cualquier lugar.
4. Una pega: el año es muy largo y, aunque soy experta en organización y gestión de tiempo, incluso a mí a veces se me acumulan las tareas. En todo el año solo me ha pasado una vez, pero ha sido suficiente para que mis planes se vinieran a bajo durante unas semanas. Al no tener hecho el mes sobre el que quería trabajar, no tenía donde anotar citas y tareas y eso me provocó un cierto estrés hasta que pude sacar tiempo para ponerme al día.
El balance ha sido muy positivo, y sin duda repetiré.
¿He resuelto tus dudas? Espero que ahora sí puedas identificar qué es mejor para ti y cuál de las dos opciones se adapta como un guante a tu forma de planificar ;)
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¡Un abrazo grande!