Datos básicos
Composición: Su componente principal, como su propio nombre indica, es el ibuprofeno.Dónde lo encontramos el ibuprofeno: en cualquier farmacia. No hace falta receta médica pero conviene consultar al farmacéutico o a nuestro doctor antes de utilizarlo. Además, leerse el prospecto antes de su utilización es de gran ayuda.
Precio estimado: alrededor de dos euros.
Nombres que recibe en el mercado: lo podemos encontrar bajo un sinfín de denominaciones pero, las más conocidas son: espidifen, advil (suspensión infantil), dalsy y neobufren.
Propiedades:
- Antiinflamatorio.
- Antipirético.
- Analgésico.
Para qué lo utilizamos:
Dolor de cabeza.
Dolor de muelas.
Dolor muscular.
Molestias de la menstruación.
Dolor neurológico de carácter leve.
Síndrome febril.
Post-operatorios.
Cuadros inflamatorios.
Formas de encontrarlo:
Supositorios.
Suspensión oral: cápsulas o comprimidos.
Sobres y sobres efervescentes.
Gel.
Cómo utilizarlo
Se suele tomar alrededor de tres veces al día pero, lo conveniente es que nuestro médico establezca la periodicidad de su consumo. Para que su absorción sea más rápida, hay que tomarlo con algún alimento. Se elimina del organismo a las dos horas, más o menos, a través de la orina.No es aconsejable su consumo a personas alérgicas, que presenten pólipos nasales, con problemas gástricos o de retención de líquidos y a las embarazadas cuando se encuentran en las tres últimas semanas de gestación ya que puede dañar al feto.
No debe utilizarse si ya se están tomando otros productos que contienen el mismo principio activo y, antes de combinarlo con cualquier otro medicamento, hay que consultar con un profesional. Como cualquiera otra medicina, no se debe mezclar con alcohol.
En el caso de olvidarse una toma, es aconsejable tomarla en el momento es que se recuerde salvo en el caso de que se junte con la siguiente. Entonces nos la saltaremos y continuaremos con el tratamiento normalmente. El ibuprofeno no debe utilizarse más tiempo del necesario.
Aunque este medicamento es menos dañino para el estómago que cualquier otro, no debemos olvidar que también afecta al organismo por lo que hay que consumirlo con responsabilidad y, siempre atendiendo a las indicaciones de un profesional.