Seguro que has escuchado hablar de esta técnica japonesa, pero ¿sabes en qué consiste el reiki? ¿Conoces sus fundamentos? Hoy te contamos los principios básicos del reiki, cómo se utiliza y cómo se desarrolla una sesión de esta técnica.
La palabra reiki es una palabra japonesa compuesta por 'rei', que significa universal y se relaciona con el universo que nos rodea, y 'ki', que significa la energía vital que fluye por todo ser vivo.
¿Qué es el reiki?
El reiki es una terapia complementaria a la medicina tradicional que fue desarrollada por el japonés Mikao Usui, que la denominó terapia energética. Trata de curar enfermedades y eliminar el estrés a través de la canalización de la energía del universo.
“Vivir en armonía con el universo, es vivir lleno de alegría, amor y abundancia”.
-Shakti Gawain-
Esta técnica tiene por objetivo lograr un equilibrio de la energía vital en el organismo humano mediante la manos. Es decir, se canaliza la energía del universo a través de las manos en base a principios de otras terapias como la reflexología, la acupuntura o el shiatsu.
Qué beneficios aporta el reiki
Esta técnica puede tratar cualquier enfermedad de tipo mental, emocional o física, puesto que se entiende que en esos casos los campos energéticos están bloqueados y, por lo tanto, a través de las manos se pueden desbloquear.
Como consecuencia de lo anterior, se pueden tratar dolores musculares, de huesos o de articulaciones, malestar por una situación emocional complicada o alteraciones del sueño o estrés.
Los beneficios que puede aportar esta terapia son los siguientes:
Recuperación de lesiones. El reiki equilibra la energía del cuerpo de forma que las lesiones y heridas se curan más rápido y, por lo tanto, los dolores se reducen.
Aumento de las defensas. Nuestro sistema inmunológico aumenta sus defensas y se evitan afecciones como gripes, catarros y otitis, entre otras.
“Cuando el camino te parezca oscuro, recuerda que tú eres la luz”
Alivio de dolores crónicos. Existen dolores como las lumbalgias, los dolores derivados de la menstruación o las migrañas que se alivian con el reiki.
Apoyo en estados depresivos. También nos puede ayudar en estados depresivos que afectan negativamente a nuestras emociones puesto que aporta relajación y paz.
Cómo se desarrolla una sesión de reiki
Una sesión reiki dura aproximadamente cincuenta minutos y el paciente estará descalzo, vestido y tumbado en una camilla. Durante la sesión se suelen utilizar música relajante y aromas como el incienso.
“Si hay música en tu alma, se escucha en todo el universo”.
Las manos se colocan en determinados puntos del cuerpo denominados chakras de forma que la energía vital fluya. Esto produce un estado de profunda relajación y de sensación de bienestar.
Algunas personas se quedan dormidas durante las sesiones de reiki, otras ven colores y sienten como si flotaran. También hay personas que no sienten ninguna de esas sensaciones, pero eso no quiere decir que el reiki no esté funcionando.
Para aprender reiki puedes acudir a algún centro especializado de tu ciudad y apuntarte a un curso para saber canalizar la energía del cosmos con tus manos y sanar desde tu lado más espiritual.
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Fuente: este post proviene de Positivalia, donde puedes consultar el contenido original.
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