Al entrar en contacto con agua caliente, las sales de irán disolviendo y su aroma se irá desprendiendo rápidamente perfumando el agua y el aire creando un ambiente de total relax.
Ingredientes:
300 gr de sal marina
1 cdta de bicarbonato
1 cda de aceite de almendras
Aceite esencial de lavanda
Colorante lila o azulado
Hojas y flores de lavanda secas
2 frascos de vidrio
Elaboración:
Repartimos la sal entre los dos frascos de vidrio.
En uno de los frascos añadimos el colorante, lo cerramos y agitamos hasta que se impregne el color en todas las sales.
En el otro frasco de sal, añadimos las hojas y flores de lavanda y mezclamos.
Añadimos 10 gotas de aceite esencial de lavanda al frasco de sales lilas y agitamos de nuevo.
Otras 10 gotas al frasco de sal con las flores y agitamos de nuevo.
Dejamos reposar ambos frascos cerrados toda la noche para que la sal se impregne bien de los aceites esenciales.
Pasada la noche, cogemos otro frasco y envasamos nuestras sales jugando con ambos colores al gusto.
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