Para empezar el uso de los aceites esenciales ¡no es de hace poco tiempo! Los aceites esenciales se conocían y se usaban desde la antigüedad, en la India (para medicina ayurvédica) y en China eran muy valorados, los aborígenes Australianos ya conocían el Niaulí, el árbol del té y donde podían utilizarlos como tratamiento terapéutico, los Egipcios embalsamaban a sus muertos usando estas maravillas que la naturaleza les daba.
Pero es en 1918, cuando un farmacéutico, Francés René-Maurice Gattefossé, estaba trabajando en su laboratorio cuando se produjo una explosión y donde se quemó las manos, instintivamente metió éstas en un recipiente donde tenía aceite esencial de lavanda, ¡el alivio fue inmediato! Y vió también como cicatrizaba y sanaba la herida muy rápidamente, con el uso de dicho aceite.
En este momento comienza la aromaterapia moderna.
Como curiosidad deciros que sólo el 10% de las plantas que se conocen son capaces de producir esencias, estas una vez que se recolectan son tratadas por destilación de corriente de vapor de agua u otros métodos y se obtienen nuestros maravillosos aceites esenciales, ¿no es chulísimo?
Algunos aceites esenciales son CARÍSIMOS, pues el rendimiento de la planta a veces es muy limitado. Deciros por ejemplo, que para conseguir solamente 1 kilo de aceite esencial de rosa de damasco se necesita recolectar 4000 kilos de pétalos de esta planta (para que os hagáis una idea, sería como un campo de fútbol) este es de los más significativos, por el contrario con 7 kilos de clavo obtenemos 1 kilo de su aceite esencial, que puede anestesiar los dientes entre otras propiedades.
También hay que tener en cuenta la procedencia de la esencia, ya que una planta en función de donde crezca puede tener más o menos riqueza de principios activos. Para que lo entendáis, uno de los principios activos de aceite esencial de siempreviva es el acetato de nerilo, si esta la planta viene de Córcega su aceite esencial tendrá un 35% de este componente, pero si viene de la zona de los Balcanes sólo tendrá un 15%. ¿Entendéis ahora por qué NO TODAS LAS MARCAS de aceites esenciales SON IGUALES? Como se dice por estas tierras ¡Nadie da duros a pesetas!.
Bueno pues para ir terminando y centrando el tiro, la aromaterapia es el uso de aceites esenciales que provienen de plantas aromáticas y sirven para tratar patologías y mejorar la salud y el bienestar de las personas. Se está viendo que la aromaterapia es mucho más eficaz en muchas patologías víricas y con hongos, donde se están creando resistencias a los antibióticos de síntesis. Además los aceites esenciales están dando resultado increíbles, también con enfermedades autoinmunes, (esta que está aquí os lo puede corroborar, tengo psoriasis y con un preparado que me hago de aceites esenciales, la tengo controlada, ¡sin necesidad de corticoides!).
Bueno con esta explicación y alguna más mi señor paciente se llevó la Ravintsara para su herpes simple labial y….a los 3 días volvió para decirnos lo impresionado que estaba con este aceite esencial. Nos comentó que a las pocas horas de la primera aplicación ya no sentía ni picor, ni tirantez en el labio, la pupa empezaba a secarse ¡y a los 3 días le había desaparecido!
¡Qué bien, otra persona convencida del uso de la aromaterapia!
¡Esto si que es pensar en verde!! Hasta el próximo día!
Aquí podréis encontrar algunos de los aceites esenciales mencionados en esta publicación!
Referencias:
Aromaterapia. El arte de curar con aceites esenciales, Dominique Baudoux.
Medicina integrativa para la familia. Dr. Cristina Pellicer Sabadí.
FUNDAMENTOS de AROMATERAPIA. Laura Mestres Fossas
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