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Sin embargo, si hay algo que es muy común y que no deja de ocurrir año tras año es que, a pesar de tus buenas intenciones, tus propósitos en algunos casos se quedan en proyectos que no llevas a cabo.
¿Por qué no consigues tus propósitos de año nuevo?
Marcarte nuevas metas a principio de año incrementa tu sensación de bienestar y te genera las hormonas de la felicidad. Pero al mismo tiempo, los deseos que quieres conseguir te pueden producir un alto nivel de estrés y sentimiento de culpa, razón por la cual los aparcas a un lado hasta el año siguiente.
Esto ocurre principalmente porque te propones una gran cantidad de objetivos al mismo tiempo que son muy ambiciosos y poco realistas, pero no ejecutas un plan para llevarlos a cabo. En otras palabras, estableces lo que quieres y de algún modo esperas a que estos cambios se produzcan por sí mismos.
Consejos para lograr tus propósitos
Uno de los errores más comunes de los propósitos de año nuevo es la falta de precisión que les das a tus aspiraciones. Y es que por definición, un propósito es únicamente el deseo o la intención de hacer algo. Es la propia ambigüedad del término la que en muchas ocasiones te puede conducir a aparcar lo que te habías propuesto a las pocas semanas de haber empezado el año.
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Con la finalidad de que logres los objetivos que te marcas para el año nuevo y no se malogren en el intento, te vamos a contar algunas claves que puedes seguir.
Sé honesto contigo mismo. Plantéate lo que realmente quieres conseguir para incrementar tu bienestar y deja a un lado todos aquellos objetivos triviales que en el fondo no te aportan nada y que no necesitas.
Precisión. Es imprescindible que tus propósitos sean claros, específicos y concretos. Por lo tanto, aléjate de las ideas abstractas y crea un plan de acción.
Preparación y progresión. No solo tienes que tener claros tus objetivos, sino que también es necesario que los diseñes de manera que te resulte factible adherirlos a tu rutina diaria y te lleven progresivamente a la meta establecida.
Constancia. Nada de lo que te propongas ocurrirá por sí solo y sin esfuerzos, así que no olvides ser constante en tu trabajo.
Ambiciosos, pero realistas. Tus propósitos deben ser lo suficientemente ambiciosos para que te motiven a lograrlos, pero no tanto que te resulten inalcanzables, ya que esto solo perjudica tu propio bienestar.
No te excedas en el número de objetivos. Es mejor que te propongas dos o tres objetivos realizables, en lugar de que prepares una lista repleta de ideas que no puedes conseguir.
Propósitos saludables para el comienzo del año
En lo que a propósitos se refiere los hay para todos los gustos: los de toda la vida, los que todo el mundo se aplica, los que tenías reservados de los años anteriores, los que son un poco egoístas pero totalmente necesarios, los que muestran tu lado más solidario, los que olvidas tan pronto te los propones pero los llevas a cabo de forma automática… A continuación te contamos algunas propuestas de propósitos saludables que puedes añadir a tu lista particular de deseos de fin de año, y cuyo objetivo es hacer que te sientas más feliz.
Practica más ejercicio
Este es uno de los objetivos que más personas se proponen al inicio de cada año, y no hay lista que se precie en la que no aparezca el objetivo de perder peso, ejercitarse más o ponerse en forma. Si no te lo puedes permitir económicamente o la idea no te motiva especialmente, no empieces el mes de enero apuntándote a un gimnasio. Por suerte, hay mil actividades que puedes realizar, en solitario o en compañía, con las que lograrás sentirte bien contigo mismo. Recuerda que la clave está en mantener la constancia.
Mantén una dieta equilibrada
No es cuestión de que pases hambre o dejes de comer, sino de que gradualmente incorpores un dieta equilibrada y sana en tu día a día. Con esto conseguirás sentirte mucho más satisfecho contigo mismo y, por supuesto, tu salud también lo agradecerá.
Deja de fumar
El tabaco es una de las principales causas de muerte en todo el mundo, además de ser la causante de muchas enfermedades. Aprovecha que empiezas a cuidarte para alejar de ti los malos humos de los cigarrillos.
Ejercita tu mente
Aprovecha para empezar a practicar ejercicios mindfulness. Con esta práctica no solo verás que fomentas tu capacidad de concentración, sino que también comprobarás que tus niveles de estrés y ansiedad disminuyen considerablemente, lo que incrementa tu bienestar y sensación de tranquilidad interior.
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Aumenta tu autoestima
Quererte y valorarte a ti mismo es esencial para poder disfrutar las pequeñas cosas de tu día a día y mantener un nivel de bienestar saludable. Este es un buen año para que empieces a mimarte y a cuidar de ti. Dentro de la práctica del mindfulness, la meditación te ayuda a lograr este objetivo.
Dedícale más tiempo a lo realmente importante
Con frecuencia, el trabajo y las obligaciones te hacen olvidarte de las personas que siempre están ahí para apoyarte en las tristezas y acompañarte en las alegrías. Procura dejar tiempo de calidad para la gente a la que quieres y que te quiere.
Deja espacio para tus pasiones
Los pequeños detalles son los que dan más sentido a tu vida. Así que reserva parte de tu tiempo en disfrutar de tus pasatiempos y de lo que más te gusta hacer.
En conclusión, es importante que establezcas unos propósitos que sean fáciles de lograr para no perder la motivación a lo largo del año. Si, además, esos propósitos están encaminados a mejorar tu salud y tu bienestar, te sentirás mucho mejor contigo mismo a medida que los vayas alcanzando.
Recuerda que cada vez más expertos del mundo de la medicina y la psicología insisten en la importancia de cuidar de nuestra mente, tal y como propone el método Crear Salud. Debemos ser conscientes de que para llevar una vida saludable también necesitamos nutrirnos adecuadamente y activarnos haciendo cosas que aporten a nuestro bienestar integral. Herramientas como la app Siente – que puedes descargarte aquí – pueden ser grandes aliadas en tu camino a una vida libre de estrés. Su metodología es sencilla de usar, pues incluye el mindfulness y la psicología positiva para mejorar tu bienestar, reducir el estrés y, en consecuencia, ser más feliz.