Durante el acto sexual se secreta una gran cantidad de lubricación auxiliar; es semi-fluida y transparente, por esta razón es que luego del coito, es normal que evidencies profusas secreciones vaginales de color claro o blanco. En el caso de la secreción vaginal de color rosa después del sexo, indica la presencia de una pequeña cantidad de sangre mezclada con el moco cervical.
En una situación de relación sexual enérgica y afanosa, violenta o que se prolongue por mucho tiempo, el revestimiento mucoso normal puede ser traumatizado. En este caso, el flujo de color rosa después del acto sexual, va acompañado de dolor y la posible alteración de la función uretral. Una secreción de estas características, aunque no puede ser catalogada como normal, no debe ser motivo de preocupación, siempre y cuando su presencia se limite a unas pocas horas. Es probable que estos casos requieran de observación médica por el bien de la prevención de complicaciones infecciosas.
Si la presencia de flujo rosado después de tener relaciones, es un incidente de una sola vez, no es una señal de problemas serios; pero si se torna en una condición corriente y repetitiva, debes acudir a una revisión médica. En la gran cantidad de casos no es un síntoma de problemas graves; sin embargo, puede estar asociado con la afectación del revestimiento normal o atrofiado endotelial de la vagina, patologías oncológicas o perturbaciones asociadas con el embarazo.
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