Cuando nacemos, nuestro organismo tiene una concentración de agua que es aproximadamente del 75%, sin embargo, cuando ya rondamos los 50 años ese porcentaje desciende hasta un intervalo del 39% al 57% en las mujeres, mientras que en los hombres va del 47% al 67%. Como consecuencia de ello, el alcohol tiene menos posibilidades de diluirse, aumenta su concentración en sangre y el hígado tarda más en procesarlo y limpiar el organismo. Por tanto, el acetaldehído, un ácido que es agente principal en todo este proceso y que contienen la mayoría de bebidas alcohólicas, permanece durante más tiempo en nuestro "interior" . Como ya habrás deducido, la conclusión final es clara, si quien nos produce las resacas está más tiempo en nuestro organismo, éstas serás cada vez peores y más duraderas.
Como seguramente en alguna ocasión te podrás ver "bajo los efectos de la resaca", te dejamos a continuación algunos remedios que te ayudarán a combatirla:
-Es muy importante tomar agua antes, durante y después de la ingesta de alcohol, es fundamental hidratarnos bien. Se recomienda que después del "exceso", cuando nos vamos a dormir, tener agua a mano y estar hidratándose durante la noche.
-Tómate una cucharada de aceite de oliva y así proteges tu estomago contra la resaca del día siguiente.
-No consumas alcohol de nuevo en un periodo corto de tiempo, la resaca será menor ya que el cuerpo lo va procesando.
-Tomar un sobre de azúcar puede ayudarte a revitalizar tus biorritmos.
-Consume limón, ya sea sólo, con algo de azúcar para reducir su acidez o si lo prefieres tómate un té con limón.
- Date una ducha con agua caliente, te ayudará a "eliminar" las toxinas y para terminarla date un "repaso"con agua fría, te ayudará a estimular la circulación sanguínea.
-Consume bebidas energéticas, pueden servirte de aliadas al día siguiente.
-Procura estar cerca de una ventana o en contacto con aire fresco, así tu cuerpo se mantiene oxigenado.
El efecto rebote del alcohol, tras un sueño plácido nos desvelamos
Antes de terminar, vamos a hablarte también del conocido como "efecto rebote" del alcohol del que tal vez ya hayas oído hablar, y que consiste en la dificultad que tenemos para "dormir de un tirón" cuando lo consumimos.
Cuando llegamos a casa tras una noche de excesos, nos acostamos y caemos rendidos, nos dormimos con facilidad, pero transcurridas unas horas, casi siempre menos de las que necesitamos para recuperarnos, despertamos y tenemos serios problemas para seguir durmiendo.
Según científicos expertos en la materia, se debe al proceso de adaptación del alcohol a nuestro organismo, que durante las primeras horas se "esfuerza" en mantener unos parámetros de sueño normales que nos permitan dormir, pero una vez lo metabolizamos y eliminamos, esos parámetros se mantienen por lo que causan justo el efecto contrario, nos desvelan.
Por término medio, se estima que nuestro organismo tarda una hora en eliminar 10 gramos de alcohol (una cerveza), mientras que el clásico cubata tarda aproximadamente el doble, es decir, un par de horas. Dicho de otro modo, si nos tomamos 5 cervezas tendríamos 5 horas plácidas de sueño y si tomamos 5 cubatas serían 10 horas antes del citado efecto rebote.
Ahora bien, no caigas en la trampa de simplificar estos cálculos, el razonamiento sería tan simplista como que a mayor cantidad de alcohol consumido mayor será la duración de nuestro sueño, dormirías más sí, suponiendo que puedas permitírtelo (trabajo, familia) pero... los efectos de la resaca serían sensiblemente superiores.