Comencé a hablarle un poco sobre el reflujo, cómo se origina, la importancia del pH adecuado del estómago y los tratamientos que por lo general se prescriben para la acidez. Por supuesto no desperdicié la oportunidad de mencionarle los nombres y las propiedades de algunos antiácidos naturales que considero de primera línea.
Es impresionante como muchas dolencias y enfermedades, cada día causan estragos en la salud de la población. Por mencionar algunos datos que soporten esta idea, se han encontrado ciertos hallazgos interesantes basados en una serie de encuestas. Por ejemplo, se sabe que el 44% de los estadounidenses experimenta acidez estomacal al menos una vez al mes. Además de esto, un 14% la padece al menos una vez por semana y un 7% de forma diaria.
Debido a esto, el Colegio Americano de Gastroenterología recomienda ciertos cambios de hábito. Por mencionar los más destacados: mejorar calidad de la ingesta de alimentos, los horarios de las comidas, el mantenimiento de un peso corporal adecuado, incluso el evitar posturas recumbentes o reclinadas al menos tres horas después de comer.
Y como es costumbre, este episodio me permitió elaborar un artículo sencillo, que comparto con vosotros y que complementa algunas ideas expresadas en otro anteriormente presentado.
¿Cuáles son las causas de reflujo ácido?
Para que recordemos un poco, en la unión del esófago con el estómago existe un músculo en forma de anillo que se llama esfínter esofágico inferior. Al relajarse este músculo, permite el paso de los alimentos al estómago cuando tragamos. Una vez que tragamos, este músculo se contrae nuevamente para evitar el ascenso de comida y ácido al esófago. La pepsina, una enzima que es responsable de digerir las proteínas, juega un rol relevante en la fisiopatología de los desórdenes relacionados con reflujo.
Además, existe un orificio en el músculo del diafragma llamado hiato. Este orificio hace posible que el esófago atraviese el diafragma y llegue hasta el abdomen. Si el hiato esta ensanchado o tiene hernia, el esfínter esofágico no cierra apropiadamente y el ácido puede ascender causando el molesto ardor.
Se ha determinado además que el Índice de Masa Corporal (método para estimar la cantidad de grasa corporal de una persona) está asociado con los síntomas de reflujo. Esto es tan determinante, que incluso un aumento de peso moderado entre personas con peso normal puede causar o exacerbar estos síntomas.
Comer comidas abundantes o acostarse inmediatamente después de una comida. Se sabe que, en pleno proceso digestivo, una posición horizontal puede originar cierta presión en el hiato, ocasionando el reflujo.
La ingesta frecuente y prolongada de ciertas bebidas como alcohol, gaseosas, café o té están también asociadas a malestares de reflujo ácido.
Habito del tabaquismo. Se ha correlacionado el efecto nocivo de los componentes del tabaco sobre todo el alquitrán y la nicotina con el padecimiento de reflujo.
El embarazo. Sobre todo, asociado a la presión que ejerce el crecimiento del bebé.
El uso de ciertos medicamentos como la aspirina, el ibuprofeno y ciertos relajantes musculares, además de los medicamentos antihipertensivos pueden ser causales del reflujo gastroesofágico.
¿Qué son los antiácidos y cuál es su efecto en el organismo?
Los antiácidos son medicamentos especialmente formulados para contrarrestar las afecciones que son causadas por el jugo gástrico, el cual contiene grandes cantidades de ácido clorhídrico y de pepsinógeno, la enzima que da origen a la pepsina.
El efecto de estos compuestos, consiste en neutralizar el ácido clorhídrico tras reaccionar con él. Esto les permite atenuar el efecto de la pepsina y otras enzimas. De esta forma se disminuye la agresividad química y enzimática sobre la mucosa digestiva, sobre todo en las zonas en las que ésta se encuentra afectada.
Cuando hay demasiado ácido clorhídrico o bien los mecanismos de protección son inadecuados, el revestimiento de las paredes estomacales, las del duodeno y del esófago pueden dañarse. Esto genera inflamación y ulceraciones.
Por ello, es muy importante, que el antiácido logre estabilizar el pH durante un cierto tiempo. De esta, manera es posible obtener la acción requerida.
La investigación ha establecido que el pH del estómago, debe situarse en el rango de 3,5 a 4, a los fines de realizar adecuadamente la digestión. Los antiácidos, tienen propiedades químicas que les permite contrarrestar el ácido. De esta forma logran equilibrar la acidez en el estómago y evitan las complicaciones debidas al reflujo.
No debemos confundir protectores gástricos con antiácidos, los protectores son indicados cuando existe una lesión en la mucosa, su tratamiento es a largo plazo y su efecto es el de reducir la cantidad de ácido que se produce en el estómago. Por ello, es importante recalcar que los antiácidos no disminuyen la cantidad de ácido producido, lo que hacen es neutralizarlo. Y los antiácidos se pueden comprar libremente, a diferencia de los protectores, que necesitan prescripción médica.
¿Cómo se clasifican los antiácidos?
De forma general, los antiácidos se suelen dividir en dos categorías: Sistémicos y No Sistémicos
Sistémicos
Forman sales que se absorben. Tienden a tener una acción rápida, logrando equilibrar el pH. Sin embargo, esta acción es poco duradera y puede haber un efecto rebote. El más conocido de ellos es el bicarbonato de sodio.
Es importante saber que este antiácido puede provocar efectos secundarios, pues parte del ion bicarbonato al reaccionar con el ácido clorhídrico puede generar una alcalosis sistémica. Además de ello, al contener sodio, debe ser utilizado con mucha moderación por pacientes con dietas bajas en sodio, con hipertensión o con enfermedad renal.
No sistémicos
Forman sales que no se absorben. Poseen una acción más lenta y sostenida. Por lo general no tienen efecto rebote. Los más conocidos dentro de ellos: las sales de Aluminio, las sales de Magnesio y las sales de Calcio.
Dentro de los antiácidos en base está el hidróxido de magnesio es mejor conocido como leche de magnesia. Igual que el citrato o sulfato de magnesio, puede causar problemas de diarrea, pues está comprobado como un laxante eficaz.
El hidróxido de aluminio, es un antiácido de acción lenta y débil si lo comparamos con el hidróxido de magnesio. Se ha visto que puede proteger el estómago de los efectos adversos del alcohol y otros irritantes. Además, inactiva la pepsina. Su uso en medicamentos comerciales, se debe al efecto de contrarrestar las diarreas que genera el magnesio.
Por su parte, el carbonato de calcio es el antiácido que posee mayor potencia. Es capaz de neutralizar todo el ácido estomacal. Sin embargo, posee algunos riesgos. Se sabe que un aproximado a un tercio del calcio administrado es absorbido, pudiendo generar cálculos renales. Además, el calcio puede reaccionar con el fósforo a nivel del intestino o de los huesos. Esto puede conllevar a agotamiento de sus niveles en pacientes que sufran de enfermedad renal.
¿En qué casos se utilizan más frecuentemente los antiácidos?
Ulceras pépticas
Se utilizan sobre todo para reducir el dolor asociado a la úlcera del duodeno. Para muchos especialistas no es aconsejable utilizarlos en cuadros de úlcera gástrica. La presentación líquida como las suspensiones, son más efectivas y de efecto más rápido que los comprimidos.
Dispepsia
La dispepsia está asociada con cualquier tipo de molestia abdominal. Esto puede incluir: regurgitación de los alimentos del estómago, sabor desagradable de la boca, ardor de estómago, sensación de llenura, abdomen inflamado y presencia de gases.
Hiperfosfatemia
Esta enfermedad pueda ser causada por la nefropatía crónica, el hipoparatiroidismo y la acidosis metabólica o respiratoria. Por lo general, antiácidos en base a carbonato de aluminio se utilizan en su tratamiento.
Osteoporosis posmenopáusica
Muchos antiácidos, en base a carbonato de calcio se utilizan para suplir el déficit de calcio. Esto es muy frecuente en mujeres adultas que presentan osteoporosis, ya que una parte del calcio es absorbido por el organismo.
Deficiencia de magnesio
Se sabe que una deficiencia de magnesio puede desencadenar hasta veintidós condiciones que ameritan visitar al médico. Este mineral, es empleado por todos los órganos de nuestro organismo. Sobre todo, los músculos, los riñones y el corazón. Su déficit se asocia con fatiga, frecuencia cardíaca irregular y contracciones musculares.
En algunos pacientes, los antiácidos en base a hidróxido de magnesio se emplean para subsanar sus deficiencias en el organismo. Esto incluye dietas o medicamentos que interfieren en su absorción. El hidróxido de magnesio, a pesar de que no es absorbido directamente por el intestino, se convierte en cloruro de magnesio que puede si puede ser absorbido.
Antiácidos naturales para la acidez
1. Vinagre de sidra orgánico de manzana
Ya en otras ocasiones os he hablado de esta estupenda alternativa natural. Como sabemos, proviene de manzanas trituradas y contiene bacterias y levaduras que se agregaron durante su proceso de fermentación. Esta determinado que ayuda a equilibrar el pH en el estómago. Posee enzimas, pectina y proteínas, todo lo cual protege contra los efectos del reflujo ácido.
Además, está comprobado que potencia nuestro sistema inmunológico, haciéndonos mas resistentes al ataque de bacterias patógenas intestinales.
2. Hinojo
Están bien caracterizados la gran mayoría de sus compuestos activos. Ellos son principalmente: fenchona, anetol, limoneno y a-pineno Se utilizan las semillas, la planta y el aceite. Posee un alto contenido de minerales y vitaminas A, B, C. Además de controlar la acidez y la pesadez en el estómago es estupendo para evitar los molestos gases abdominales.
Se sabe que contiene además cantidades importantes de fibra. De acuerdo a estudios, el anetol es el responsable de relajar el estómago, prevenir los dolores y evitar la flatulencia.
3. Aloe vera
Esta planta tan conocida, no deja de estar presente en muchos momentos importantes de nuestra vida, para aliviar nuestra salud. Como recuerdan, posee potentes propiedades antiinflamatorias, posee múltiples vitaminas, minerales y aminoácidos.
Aparte de equilibrar el sistema inmunológico, logra ayudar a expulsar las toxinas del cuerpo. En el 2015 se efectuaron estudios comparativos sobre su efecto en síntomas principales de ERGE (ardor, regurgitación, flatulencia, eructos, disfagia, náuseas y vómitos).
Los resultados arrojaron que se comportó tan bien como el omeprazol y la ranitidina, pero sin sus efectos adversos.
4. Papaya
Esta fruta tropical es realmente muy generosa con los productos que nos ofrece. Mas allá de sus vitaminas y minerales, es altamente recomendada por los médicos, ya que contiene papaína. Se recomienda su consumo a diario, por su alto contenido de fibra y enzimas digestivas.
Sus usos en la medicina tradicional son muchos, estos incluyen, aplicaciones para el control de bacterias y como potente desinflamatorio. Se ha utilizado además en la prevención de cáncer, tratar la diabetes, el asma y como coadyuvante en procesos digestivos.
La papaína, es excelente para ayudar a tu sistema digestivo a mejorar los procesos, sobre todo el de la digestión de las proteínas. Esto es un perfecto alivio para los procesos digestivos y evita además los molestos reflujos.
5. Nopal
Esta planta ha sido muy bien estudiada, debido a la presencia de ciertos componentes que actúan protegiendo el funcionamiento y el equilibrio de la función digestiva. Ella contiene una serie de polisacáridos en sus hojas (cladodios) que forman parte de muchas composiciones farmacéuticas de uso oral, algunos nutracéuticos, así como una serie de alimentos naturales.
6. Hojas de olivo
Según información de la Farmacopea Europea, la hoja seca del árbol de olivo contiene al menos un 5% de oleorupeina. Este es un mono terpeno iridoide muy importante del cual ya antes les he hablado. Presenta además importantes cantidades de ácidos fenólicos, dentro de los que destacan ácido cumárico, ácido cafeico, ácido ferúlico, y ácido vanílico. Las hojas de esta planta, han sido utilizadas por las poblaciones asentadas en el mediterráneo desde hace muchos siglos. Sobre todo, en Grecia, Turquía, Portugal, España, Italia, Francia, Israel, Túnez y Marruecos.
Su uso ha sido en forma de extracto, té de hierbas y polvo que contienen compuestos bioactivos con actividades antioxidantes y antiinflamatorias. Muchos estudios se han realizado para evaluar estas propiedades. Se ha encontrado incluso, que no solo previene los malestares asociados al reflujo ácido, sino que además es capaz de prevenir la formación de lesiones gástricas.
7. Regaliz
La raíz de esta planta se utiliza para calmar los problemas gastrointestinales. Se ha comprobado que el extracto, funciona excelentemente en casos de intoxicación por alimentos, úlceras gástricas y acidez estomacal. Se ha comprobado que puede favorecer la velocidad de recuperación de la mucosa deteriorada. Esto se debe a las propiedades antiinflamatorias y de refuerzo inmunológico del ácido glicirrínico.
La utilización para la realización de preparados para el alivio de bronquios y garganta está documentado 2.000 años a.C. Dioscórides médico griego, hablaba en sus tratados sobre el regaliz y sus beneficios para el alivio de garganta, ardor de estómago y afecciones renales. Se realizó un ensayo controlado donde el regaliz promueve la mejoría de la úlcera péptica, acidez y gastritis sin efectos secundarios.
Concluyendo
De verdad que no deja de asombrarme toda la información sobre medicina alternativa que se genera en la actualidad. Mucha de ella, busca es desentrañar cuáles son los principios activos que se esconden detrás de las creencias tradicionales.
Y os lo he mencionado en muchas ocasiones, la sabiduría de los diversos pueblos, es sumamente enriquecedora. Y pensar, que sido transferida principalmente por vía oral. Esto es grandioso y es uno de los legados más grandes que podemos disfrutar. Yo siento que, de alguna manera, todas estas cosas que hablé con mi amiga y que ahora os entrego en el post, tienen utilidad.
Eso es tan cierto, que tan pronto mi amiga, se dio cuenta que no estaba respetando su digestión, entendió muy rápido el porqué de su acidez. Luego fue a mi casa y me agradeció, por haberle transmitido una valiosa información de forma muy sencilla.
Sucede que ella, en ocasiones acostumbra a levantarse temprano y tan pronto desayuna, se acuesta de nuevo a dormir. Cuando no lo hace en las horas del desayuno, lo hace luego de cenar. Esto prácticamente la estaba conduciendo a una situación prácticamente sin salida.
Quiero dejaros, no solo ideas, también quiero dejaros algunas inquietudes. En especial, para que reflexionéis como estaís cuidando vuestra salud, partiendo de una correcta alimentación, el respeto por los horarios y el descanso de forma adecuada.
Esto solo nos dice algo, que la disciplina es un arte que hay que cultivar día a día. Mi amiga afortunadamente superó la situación de salud. Me menciona que jamás olvidará que es muy importante cuidarse. Pues el afecto que ella tenga por su salud, se va a revertir en tiempo de calidad para compartir con su familia, a quien tanto ama.
“El amor es el espacio y el tiempo medido por el corazón.”
Marcel Proust
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Referencias:
https://www.aloecure.com/blog/natural-antacid-alternatives/
https://www.belmarrahealth.com/natural-antacids-help-heartburn-better-digestion/
https://www.bmj.com/rapid-response/2011/10/28/oesophagus-heartburn-and-honey
https://ceas.uc.edu/special_programs/ceems/CEEMS_Pathways/SIT/CEEMS_InstructionalMaterials/ScienceUnits/CurtBlimline_Antacids/CB_Less1.html
https://www.ema.europa.eu/documents/herbal-report/final-assessment-report-olea-europaea-l-folium-first-version_en.pdf
https://www.kernpharma.com/es/blog/protectores-gastricos-versus-antiacidos-diferencias-y-uso-correcto
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC2886414/
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/26742306
https://www.remediesforme.com/natural-home-remedies-heartburn-acid-reflux/
https://www.todaysdietitian.com/newarchives/020314p30.shtml
https://www.webmd.com/heartburn-gerd/ss/slideshow-heartburn-overview
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