Debido al ritmo de vida que llevamos actualmente, cada vez hay más personas con trastorno del sueño o insomnio, que hace que de día se queden dormitando en cualquier lugar o en cualquier posición, sin ningún tipo de pudor. Dormir bien es algo que nos aporta un alto grado de beneficio para la salud y que, por tanto, debemos cuidar.
Las investigaciones muestran que las personas con insomnio son mucho más propensas a experimentar problemas de salud asociados a la ansiedad, la depresión , la diabetes y la insuficiencia cardíaca congestiva. También afecta a nuestra productividad y a nuestra línea. Si formas parte del grupo de los insomnes, seguro que estos consejos de yoga te ayudarán a pasar de shavasana (la postura de relajación final) al sueño profundo.
1. Comienza con una actitud de gratitud
Los largos días y las largas horas hacen que quedarse dormido sea un largo proceso. Así que para restablecer tu cerebro y dejar que tu cuerpo cuál es la hora de relajarse, lo mejor es que utilices la postura de shavsana con la meditación. Es fácil no centrarse en todo lo que ocurrió en el día cuando estabas constantemente en movimiento con miles de cosas a la vez, sin embargo diez minutos conscientes en esta postura te pueden cambiar exponecialmente tu punto de vista de las cosas del día. Así que cierra los ojos, comienza con las palabras "gracias", y deja que las cosas positivas del día se desarrollen en silencio absoluto.
2. Gira y respira
Después de que has realizado momento de meditación y agradecimiento en silencio, ponte en posición sentada. Tu espalda estará muy resentida por el duro día, con tensión, así que respirar profundamente mientras giras a ambos lados es siempre una excelente manera de liberar las tensiones del día. Además, esta postura no sólo te ayuda a relajar la mente y desestresarte, sino que si estiras los hombros (otro punto de tensión) mientras estiras también la columna vertebral conseguirás dos liberadores de tensión por la postura de uno.
3. Postura del niño krishna antes de dormir
Siguiendo con la columna vertebral, en la siguiente postura te tumbarás en tu colchón como si fueras un niño, tumbado boca abajo con los brazos extendidos, con una pierna totalmente estirada y la otra pierna doblada con la rodilla a la altura de la cadera. Esta es una postura clave del yoga restaurativo y muy fácil de realizar, además de ser una postura que te relaja mucho. De hecho hay gente que se duerme en clase haciendo esta postura. Realiza unas quince respiraciones en esta postura y sentirás una gran liberación física, mental y emocional.
4. Avanza con una flexión hacia delante
Igual muchas noches pegas un salto de la cama y recordando acontecimientos que te han ocurrido durante el día, dándoles vueltas a la cabez "Si hubiera hecho esto o si hubiera actuado de esta forma ante esto". Para evitar estas palizas mentales en la cama, estírate hacia adelante haciendo una curva con tu cuerpo. Esta postura de yoga puede ser intensa (especialmente si tus tendones están tensos), por lo que para liberar toda el estrés posible es recomendable que utilices una almohada o una manta enrollada para ponerla contra el pecho. Adiós a la ansiedad.
5. Sé feliz como un bebé
Ahora que has eliminado la ansiedad, la siguiente postura te hará tan feliz como un bebé. Túmbate boca arriba y acerca una pierna hacia tu pecho y cara, sosteniéndola con los brazos. Esta postura, que te hace abrir la cadera, logrará que sonrías porque en cada inhalación y exhalación no dejarás de pensar, "Guau, no puedo creer que todavía puedo hacer llegar mi pierna hasta mi cara". Te puedes ayudar de una correa para yoga o una toalla. Hago un lado a la vez y lo siguiente que sé, estoy en mi lado profundamente dormido.
6. Abre tu corazón
Con el shavasana más cerca que nunca, la postura final antes de acostarte consiste en una postura en la que te reclinas de lado. Esta postura ayuda a aliviar los síntomas de estrés, depresiones leves, o incluso, las molestias de la menstruación. Lo curioso es que esta es, muchas veces, la forma de dormir durante gran parte de las noches para mucha gente. Esta postura te ayuda a encontrar una relajación mental, haciendo diez respiraciones profundas. Tras ellas te encontrarás con tus dulces sueños.